La ciencia de la Paleontología lleva varias décadas ejerciéndose en el estado. El gran pionero fue Eliseo Palacios Aguilera, profesor naturalista que se interesó por los restos fósiles; fue el primero en realizar inspecciones de esta índole en Chiapas, y descubrió los primeros restos de mamut, armadillos gigantes y megaterio en la zona de la Frailesca.
Palacios Aguilera dio la idea de crear el Museo de Historia Natural en Tuxtla Gutiérrez, el cual se inauguró en 1942, donde se expusieron los primeros huesos de mamut y otros animales de la era prehistórica.
“Eliseo Palacios tenía la intención de hacer un museo más grande, por desgracia falleció en 1944 y muchos de sus proyectos quedaron estancados; gracias a Miguel Álvarez del Toro, quien colaboró cercanamente a él, se resguardó el material fósil. Hasta 1989 se reactiva la paleontología, pero con un proceso muy lento”, narró Marco Antonio Coutiño José, director de Paleontología de la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn).
IHN
Para 1997 se comienza a conformar el primer grupo de paleontólogos del estado, quienes estaban adscritos en ese entonces al Instituto de Historia Natural. La principal idea de estos primeros investigadores, era que la población en general conociera a los seres vivos que habitaron estas tierras hace millones de años.
“De ahí surge la idea de crear un Museo de Paleontología. Se planeó asentarlo en un edificio que se tenía visto, el cual se encontraba abandonado y el 21 de octubre del 2002 se inaugura el Museo de Paleontología Eliseo Palacios Aguilera, en la capital chiapaneca”, agregó Coutiño José.
Las instalaciones se encuentran en la Calzada de los Hombres Ilustres, entre el Museo Regional de Chiapas y el Jardín Botánico. Allí se pude observar la exposición permanente de fauna antepasada en el estado.
Cabe destacar que este museo es único en el sureste de México, además alberga fósiles singulares para la ciencia como algunos tipos de peces.
Descubrimientos
Los paleontólogos han descubierto en el estado diversos fósiles, de edades oscilantes entre 40 a 100 millones de años, vestigios de crustáceos, clase a la que pertenecen los cangrejos, camarones y langostas. Muchos de ellos se han encontrado en el municipio de Ocozocoautla.
También ha habido nuevos registros sobre los tramos entre Villaflores y Villacorzo, donde se han hallado restos de un roedor prehistórico, los más grandes que han existido en la historia de la Tierra, parecidos físicamente al capibara, animal de la familia de los cávidos.
“Hemos encontrado restos de caballos, extremidades y mandíbulas con dientes, animales que habitaron estas tierras hace aproximadamente diez mil años. Esto es muy importante, por eso estamos contribuyendo a formar esquemas sobre cómo Chiapas era un punto importante de migración, por donde cruzaban animales de Sudamérica a Norteamérica y viceversa”, expuso el director de Paleontología.
Cabe destacar que este ser en algún momento del tiempo migró hacia otros continentes como Europa y América, pero por diferentes causas se extinguió. En el momento de la conquista, los españoles los vuelven a introducir.
“Nos encontramos redoblando esfuerzos para seguir con investigaciones paleontológicas para crear o retroalimentar parte de la gran historia de Chiapas”, finalizó Marco Coutiño.