Investigadores y miembros de la sociedad civil alertaron del cambio de coloración de hasta un 40 por ciento de los depósitos de agua del Parque Nacional Lagos de Montebello, lugar apreciado por la tonalidad de sus aguas.
Los investigadores y miembros de la sociedad civil, se reunieron en Bosque Bello, donde dieron a conocer las acciones que han llevado a cabo instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y otras instituciones, para conocer las causas del cambio de color de algunos de los lagos.
Territorio
El Parque Nacional, con más de 45 lagunas de tonalidades que van del azul turquesa al verde, cambió de color hace más de una década, pero desde entonces no se han tomado acciones para contrarrestar el daño.
El investigador de la UNAM, Roberto Bonifaz, calificó de “dramático” el problema en la zona que se registra, entre enero y febrero del 2003, al grado que el sistema lacustre de una tonalidad azul, se tornó de “color de malteada”, como dijo su menor hijo al ver los lagos durante un paseo por la zona.
División
Bonifaz dividió el Parque Nacional en dos sistemas: los lagos de planicie y los lagos de montaña, es decir, los primeros que están en el lado poniente y el segundo en el oriente.
Y el sistema lacustre es el que está contaminado en su totalidad, integrado por los lagos La Encanta, Bosque Azul, El Potrero, Yalmuz, San Lorenzo, Liquidámbar, Chachaj y Balantetik.
Este sistema representa un 40 por ciento del conjunto de lagos del Parque Nacional, es decir, un 90 por ciento de los lagos de planicie.
Así los lagos de planicie son lo que están “totalmente contaminados”, mientras que los lagos de montaña, por encontrarse en una zona más amplia, aun conservan su color, como Cinco Lagos, Tziscao, San José, Laguna Esmeralda y otros.
Antecedentes
El investigador recordó que hace dos décadas, el arqueólogo Carlos Navarrete, que ha trabajado por más de medio siglo en la zona arqueológica de Chincultik, alertó de la “cosas raras” que sucedían en el lago de Balantetik.
Los pobladores de la comunidad Hidalgo, hicieron lo propio y denunciaron la presencia de olores fétidos y la muerte de peces entre enero y febrero del 2013.
Después de la alerta que lanzó Navarrete, de lo que pasaba en Lagos de Montebello, lamentablemente “no supimos atenderlas a tiempo, hasta que vino el desequilibrio completo del sistema y tenemos este problema”.
Bonifaz estimó que por “fortuna” el sistema que está contaminado tiene un reflujo que va hacia La poza del soldado, que culmina en un sumidero, lo que “da una cierta esperanza de que en la medida de que evitemos la llegada de nutrientes, el sistema se pueda recuperar”.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua), a través del Fondo de Agua y la Comisión Nacional para la Ciencia y la Tecnología (Conacyt), sacaron una convocatoria en el 2011 para hacer el estudio de calidad de agua en este sistema lacustre que viene desde la laguna Juznjaba en el municipio de Comitán, a unos 60 kilómetros de distancia de la cabecera municipal.