Llama al aprovechamiento saludable ante vacaciones

Llama al aprovechamiento saludable ante vacacionesLas vacaciones como una oportunidad de refuerzo familiar. Diego Pérez / CP

En el marco del inicio del periodo vacacional para los niveles de educación básica, el arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, Monseñor José Francisco González González, exhortó a jóvenes y familias a aprovechar este espacio; no sólo para descansar, sino también para fortalecer su dimensión humana, intelectual y espiritual alejándose de adicciones tecnológicas y reconectando con la naturaleza, la cultura y sus seres queridos.

Nutrir el cuerpo

El arzobispo señaló que no se trata solo de “no ir a la iglesia”, sino de vivir unas vacaciones que nutran el cuerpo, la mente y el espíritu.

Citando a los antiguos romanos, González González reflexionó recordando el dicho en latín “Requiem operari melius” que significa descansa para trabajar mejor.

Ese descanso, dijo, no debe limitarse a inactividad, sino convertirse en un tiempo para equilibrar las áreas de la vida, que quienes realizan trabajo intelectual dediquen tiempo a lo físico, y viceversa, o que aprovechen para estudiar idiomas, ciencias, robótica, diplomados o practicar deporte.

Reconectarse con la naturaleza

Además de este equilibrio, el arzobispo enfatizó la importancia de reconectarse con la naturaleza respetando bosques, ríos y aire limpio, y así recobrar la experiencia humana pendiente en la rutina diaria.

“Sal a respirar aire... las vacaciones se vuelven una experiencia de desarrollar lo que humanamente habías dejado un poquito en pausa para que seas un humano más integral”, puntualizó.

Asimismo, recalcó cómo este tiempo puede reforzar vínculos afectivos, acercar a familiares y amigos, y servir como antídoto contra la adicción al dispositivos electrónicos.

“La adicción al celular nos ha robado la capacidad de admirar la naturaleza, de admirar a las personas, de saber compartir un diálogo, una convivencia”, advirtió.

Finalmente hizo un llamado a la juventud y a los adultos a hacer un buen uso del tiempo de descanso, destacando que se ha perdido la capacidad de asombro y disfrute de la vida sencilla.