En la liturgia de este domingo 16 de junio, la Iglesia Católica reflexiona sobre el misterio del Reino de Dios a través del Evangelio según San Marcos (4, 26-34), donde Jesús compara el reino con un hombre que siembra semillas en la tierra.
Al respecto, el presbítero Hedilberto Pérez Vicente, comparte que en la primera lectura nos presenta al profeta Ezequiel, la magnificencia de Dios, dueño de la creación te hace brotar, un brote; un retoño hasta de los troncos secos; así dice el profeta, brotar un retoño verdad del tronco de Jesé y es precisamente Jesús este retoño nuevo y es que cuando hay fe y confianza en el señor dice San Pablo, podemos alcanzar el premio, cuando hay esa confianza, cuando hay esa fe.
De la misma manera que afirma que de acuerdo al evangelio somos estas semillas puestas en este mundo, no estamos aquí por casualidad, Dios tiene sus planes con nosotros y nadie se va de este mundo sin haber cumplido su cometido, su misión. Por eso miren, tenemos que dejar en manos de Dios nuestra vida, para que el Espíritu Santo haga nacer y fructificar esa semilla, en otras palabras es la fuerza del Espíritu la que hace que den resultado nuestros pequeños esfuerzos.
Mensaje
Tal vez nuestros esfuerzos son muy minúsculos, pero Dios nos sorprende, por eso esto es fruto de verdad son abundantes por la gracia de Dios, afirma.