Con la cercanía del Día de Muertos, el arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, monseñor José Francisco González González, hizo un llamado a la ciudadanía a mantener viva la tradición católica del Día de Todos los Santos y a no confundirla con las celebraciones de Halloween, las cuales, promueven una visión contraria a los valores de la fe cristiana.
El prelado, invitó a promover en los niños valores de fe y esperanza, recordando que “la vida está llamada a florecer”.
“El Día de Todos los Santos es una tradición católica inmemorial, mientras que el Halloween es una práctica que, más que invitar a la vida, invita prácticamente a perderla”, expresó.
Glorifican la muerte
Además, señaló que muchas representaciones actuales de esta fecha, como las series o películas de zombis, transmiten mensajes que glorifican la muerte.
Explicó que el cristianismo promueve la vida como un don de Dios que debe florecer con alegría y comunidad, y no con violencia o miedo.
En ese sentido destacó que en algunas regiones del país se ha impulsado una alternativa llamada “Santo Lím”, en la cual los niños se disfrazan de santos o santas en lugar de monstruos, para conocer sus vidas y aspirar a ideales más elevados.
“Hoy, por desgracia, muchos niños sueñan con ser sicarios o pertenecer a grupos delictivos, porque la cultura actual les propone eso como modelo de éxito. Pero debemos elevar el espíritu, no quedarnos en lo superficial, sino aspirar a la santidad”, enfatizó.
El arzobispo recordó que el mensaje central del Día de Todos los Santos es que todos los seres humanos, sin importar su carácter o condición están llamados a la santidad, entendida como un proceso de crecimiento espiritual guiado por la gracia de Dios.
“Dios nos lleva en un proceso de crecimiento; Él nos pule como diamantes. Todos podemos llegar a ser santos si dejamos que su gracia actúe en nosotros”, concluyó, reiterando su invitación a celebrar estas fechas con sentido de fe, amor y esperanza.












