Maíces nativos deben protegerse

Walter López Baez, director de Coordinación y Vinculación del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), comentó que la reforma aprobada recientemente para conservar y proteger la diversidad de las 59 razas de maíces nativos en México cumplirá con su objetivo a largo plazo.

El cultivo de maíz transgénico todavía no había ganado terreno en Chiapas, porque no se sabe que puede ocurrir en los suelos, pero una contaminación que se desconoce como poder contrarrestarla podría ser catastrófica para los genes originales del maíz que tenemos en el país como un patrimonio.

Razas

Mencionó que en Chiapas se tienen 12 razas de maíz nativo, como el jarocho, glotón, olotillo, comiteco, sobre las cuales se trabaja en su conservación de acuerdo a los climas, condiciones de suelos y otros factores, cada raza tiene sus propias características.

Todas esas razas dan la riqueza genética que tienen los mejoradores para hacer variedades que no son transgénicas, pero que sean más rendidoras y adaptadas al ambiente local, lo que forma parte del trabajo del Instituto.

“En México había ganado cero terreno el maíz transgénico, se había querido introducir, pero siempre ha sido la oposición nuestra que no se cultive, hay soya transgénica que se comercializa en el Soconusco, pero no es avalada por el gobierno, el justificante es que no es centro de origen”.

El maíz transgénico que ingresa es importado aunque se desconoce en que proporciones; también consideró, falta más regulación en cuanto a los productos que consumimos y que son de origen transgénico, que no entra como maíz.

Modificaciones

Dentro de las modificaciones a la Carta Magna destaca que debe priorizarse la protección de la biodiversidad, la soberanía alimentaria y su manejo agroecológico, así como la promoción de la investigación científica-humanística, la innovación y los conocimientos tradicionales.