La diabetes puede generar muchas complicaciones si el paciente no se apega completamente al tratamiento y el régimen alimentario que requiere; puede sufrir desde una neuropatía diabética, cataratas, pie diabético y la enfermedad renal crónica, estas dos últimas son desafortunadamente las más frecuentes.
Especialista
James Gómez Montes, especialista en salud pública, señaló que en el caso del pie diabético, es muy frecuente en los pacientes porque si sufren una herida, por muy leve que sea, si los niveles de azúcar no están controlados es difícil que cicatrice de forma correcta.
Si la herida avanza puede causar una necrosis, ya en un dedo, el pie o la pierna, porque se compromete la circulación sanguínea y al final la única solución es amputar, pero reiteró, esto pasa si la diabetes no está controlada.
La enfermedad renal crónica, explicó que puede terminar en la necesidad de aplicar la hemodiálisis. Si un paciente llega a este punto, prácticamente requerirá el tratamiento el resto de su vida, porque los riñones ya no filtran correctamente y retiene líquidos que pueden afectar más la salud.
Tratamientos
La hemodiálisis consiste, en términos comunes, en lavar la sangre para disminuir la toxicidad que puede tener por la falta de funcionamiento de los riñones. Este tratamiento se recibe gratis con seguridad social, pero de no contar con ella, es un problema porque una sesión de hemodiálisis cuesta en promedio dos mil pesos y el paciente requerirá tres por semana.
Es decir, solo en este tratamiento necesitará tener 24 mil pesos, sumado al costo de los medicamentos, por lo que deberá tener al menos 35 mil pesos mensualmente.
Por eso es importante apegarse al tratamiento médico y al régimen alimentario necesario para no llegar a este extremo.
Destacó que hoy día hay personal de salud que se especializa en tratar la diabetes, aunque se requiere de todo un equipo multidisciplinario, como el cirujano, traumatólogo, angiólogo y médicos internistas.
La dieta para un diabético no se trata de eliminar todo, lo malo siempre serán los excesos. Ya no se puede tomar refrescos embotellados por su alto contenido de azúcar, pan, pasteles, dulces, procesados; el resto, solo es reducir algunas cosas, como las tortillas.