Padres de familia y docentes acusaron que dentro del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep) de Chiapas y en particular en Tapachula, hay incertidumbre, por lo que se ha encendido la alarma por presuntas irregularidades administrativas, sindicales y actos de corrupción al interior que afectan el funcionamiento y la imagen de la institución.
Los denunciantes, que pidieron la omisión de nombres por temor a represalias, señalan que en la actualidad bajo el amparo del Sindicato Único de Trabajadores Administrativos del Conalep (SUT Conalep), un grupo de servidores públicos presuntamente heredados del sexenio anterior habría encontrado en sus cargos una “zona de confort” sin cumplir a cabalidad con sus funciones, percibiendo su salario puntualmente cada quincena, pero sobre todo afectando la educación de los alumnos que buscan su profesionalización técnica.
Advierten que es preocupante la falta de acción del director general del Conalep Chiapas, Leonardo León, quien a pesar de haber tenido conocimiento de la situación ha optado por mantener una postura pasiva frente a los señalamientos, lo que algunos califican como omisión o incluso complicidad.
Lo que ocurre contrasta con la política de Cero Corrupción y Cero Impunidad impulsada por el gobernador, lo que hace aún más evidente la contradicción entre el discurso oficial y lo que ocurre dentro del sistema educativo técnico.
Uno de los casos más recientes es el del delegado sindical, Carlos Figueroa Frutos, señalado por iniciar una “huelga de brazos caídos” sin causa justificada, lo que habría afectado el desarrollo académico y administrativo del plantel Tapachula.












