Más de un millón de ganado ingresa ilegalmente

Más de un millón de ganado ingresa ilegalmenteAfirman que la plaga del gusano barrenador evidenció el problema del trasiego. Ramón García / CP

De manera mensual, más de 100 mil cabezas de ganado ingresan a Chiapas desde la frontera entre Guatemala y México. Lo anterior agravó el problema del gusano barrenador en la frontera sur, ya que los animales son introducidos sin ningún control sanitario. Además son nacionalizados y embarcados hacia el norte del país donde los engordan, comercializan y finalmente los exportan.

Evidencian el problema

La denuncia fue realizada mediante una entrevista otorgada por el productor de ganado Julio César Herrera. Refirió que el problema del gusano barrenador vino a evidenciar el grave problema del trasiego ilegal de ganado que proviene de Centroamérica y es que se estima que al año ingresa un millón de cabezas de bovinos, por diversos puntos de Chiapas.

Ganado nacionalizado

Sostuvo que el ganado ingresa de manera ilegal, pero en territorio chiapaneco es "nacionalizado", es decir, se le coloca arete y hasta es marcado como si fuese un producto nacional para ser embarcado y trasladado al norte del país.

Indicó que el contrabando de ganado es incontrolable porque hay un mercado que demanda este producto. Además hay muchos intereses económicos, tanto de traficantes como de las mismas autoridades que se prestan a actos de corrupción.

No existe verificación

Por su parte, el ex presidente de la asociación ganadera local de Suchiate, Genaro Ordaz, afirmó que mientras no exista un control estricto del ganado que ingresa a México, el problema sanitario será una constante, ya que no existe una verificación de las condiciones en que llegan estos animales.

"Los productores del norte piden el cierre de la frontera sur, pero esto no es viable porque el ingreso de ganado se da por diversos puntos de Chiapas y difícilmente se podría controlar", expresó.

Mencionó que desde hace tiempo se pidió un cerco sanitario y un control estricto de los animales, pero las autoridades desatendieron este llamado, y hoy se enfrentan las consecuencias con el gusano barrenador.