Muchas escuelas no venden productos chatarra

El alto consumo de refrescos y bebidas azucaradas y la necesidad de bajarlo ha entrado a discusión otra vez. Carlos López / CP
El alto consumo de refrescos y bebidas azucaradas y la necesidad de bajarlo ha entrado a discusión otra vez. Carlos López / CP

Recientemente entró a discusión otra vez el alto consumo de refrescos y bebidas azucaradas en México, tras anunciar un aumento al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios para inhibir esa tendencia en la población. En el ámbito educativo, la mayoría de las escuelas de nivel básico respetan la prohibición de esos productos al interior de los planteles.

En las escuelas se prohibió la venta a partir de marzo pasado tras una reforma a la Ley General de Educación y los lineamientos de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la Secretaría de Salud. Además de refrescos y bebidas azucaradas se incluía frituras, dulces, panes empaquetados y jugos con edulcorantes.

Esta medida busca erradicar la obesidad infantil y enfermedades asociadas al consumo de productos altos en azúcares, grasas y sodio; la finalidad fue promover opciones saludables como frutas, verduras, cereales integrales y agua natural, que es lo que vende en la mayoría de las escuelas.

Al preguntar a un grupo de madres y padres de familia, dijeron que en las escuelas de sus hijos respetan esta medida, únicamente venden frutas, aguas de sabor natural y desayunos completos, incluso informan cada semana a la comunidad lo que se sirve en las cafeterías.

Solo una madre de familia dijo que en la secundaria de su hijo todavía venden refrescos embotellados y sabritas, aunque en menor cantidad a diferencia de antes, ya que en realidad ningún papá o mamá cuestionó si aplicarían dicha prohibición.

Sin embargo, mencionan que los vendedores ambulantes afuera de las escuelas todavía siguen presentes, en ese caso ya depende de los papás y mamás si les compran dulces, comida chatarra o refrescos.

El consumo de refrescos embotellados y alimentos ultraprocesados sin valor nutricional en México es de los más altos en Latinoamérica, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).