Agrupaciones y colectivos de mujeres de cuatro regiones de Chiapas, exigieron un “alto a los despojos de nuestras tierras, que se respete el derecho de la energía eléctrica y que sea reconocido constitucionalmente como un derecho humano”.
En un documento difundido al final de su octava asamblea estatal, que fue realizado en días pasados en el municipio de Salto de Agua, ubicado al norte de la entidad, con la finalidad de “analizar, reflexionar, aprender y sanarnos colectivamente desde el compartir nuestras palabras en común”, las mujeres manifestaron que el sistema capitalista y la violencia siguen afectando a sus comunidades.
“En nuestra región Altos, tseltal y tsotsil, las mujeres manifestamos que el sistema capitalista sigue dañando a nuestra madre tierra mediante la tala de árboles, el uso de agroquímicos y fertilizantes sintéticos así como la venta de maíz transgénico para la siembra” y “la delincuencia y el crimen organizado siguen dentro de nuestras comunidades ganando terreno, principalmente con los jóvenes que ya no quieren trabajar; prefieren robar para tener dinero para la compra del alcohol y drogas que el mismo crimen organizado vende”, dijeron.
Ante esta situación propusieron “el fortalecimiento, principalmente de nuestros compañeros, sin dejar de lado a nuestras compañeras y jóvenes para que se puedan crear alianzas y las mujeres tengan esa motivación para seguir con fortaleza y poder luchar en colectividad”.
Denuncias
Las mujeres de la zona Costa denunciaron que en esa región “sigue la desaparición de jóvenes y la violencia continúa incrementándose, logrando romper nuestros lazos familiares y comunitarios, a la par de que sigue el despojo de tierras por la construcción del Tren Transístmico vigilado por la Secretaría de Marina, que va imponiendo miedo, hostigamiento y represión para que la sociedad no levante la voz”.
Las asistentes de la zona ch’ol y tseltal de la zona Norte denunciaron el “aumento del alcoholismo, la drogadicción y el tráfico de indocumentados, principalmente en los adolescentes hombres y mujeres, provocando enfermedades, muertes, desapariciones y sin la intervención de las autoridades competentes”.











