Un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) reveló que el 61.7 % de los docentes indígenas egresados de la Licenciatura en Educación Preescolar y Primaria para el Medio Indígena (Lepepmi 90) en Chiapas entre 2011 y 2021 son mujeres.
El análisis de 708 tesis y tesinas muestra, sin embargo, diferencias clave en los temas abordados por género: mientras los hombres se centran en contenidos curriculares como lengua y matemáticas, las mujeres exploran más aspectos sociales como emociones, cuidados y equidad de género.
Retos estructurales
El estudio “Nociones, conceptos y preocupaciones del profesorado bilingüe en Chiapas”, liderado por la doctora Ana Magdalena Solís, señala que los planes educativos ignoran realidades locales, principalmente por que los programas no integran saberes comunitarios, como técnicas de tejido o medicina tradicional, pese a que estos aparecieron en 15 % de las tesis.
También hay una ausencia de perspectiva de género, pues solo 8 % de los hombres y 5 % de las mujeres abordaron equidad de género, aunque es urgente en un estado con altos índices de matrimonio infantil y deserción escolar femenina.
Voces de las aulas
Las tesis revelan preocupaciones comunitarias profundas. Una docente tsotsil en Oxchuc documentó cómo el miedo a la discriminación hace que jóvenes abandonen el traje tradicional:
“Hablar de saberes comunitarios es hablar de la naturaleza. Enseñamos a los niños a tejer con tintes naturales, pero los jóvenes ya no quieren portar su ropa originaria”, destaca la docente.
Otra maestra en Tenejapa denunció la carga desigual sobre niñas indígenas: “Se levantan a las 4 AM a moler maíz, lavar y cuidar hermanos. Llegan cansadas a clase y no participan por temor a burlas”.
El 60 % de las tesis sobre matemáticas fueron escritas por mujeres, desafiando estereotipos globales que subrepresentan a las mujeres en esta área. No obstante, persisten sesgos: los hombres priorizaron contenidos institucionales (75 % de sus trabajos), mientras las mujeres incluyeron problemáticas comunitarias, como matrimonios infantiles y roles de género.
Aunque el 90 % de los docentes son hablantes de lenguas indígenas (tseltal, tsotsil, ch’ol), el español dominó como “lengua de autoridad” en las propuestas pedagógicas, reflejando una disglosia que subordina las lenguas originarias.
La mayoría de las docentes laboran en preescolar y primaria, con salarios bajos y escaso acceso a puestos directivos. Solo el 5 % ocupa roles de liderazgo en el sistema educativo chiapaneco.
Contexto crítico
Chiapas tiene el segundo menor grado de escolaridad en México (promedio: segundo de secundaria). Pese a ello, las docentes indígenas superan en titulación a los hombres, aunque enfrentan techos de cristal: el 71.6 % de los documentos pospandemia (2020-2021) fueron escritos por mujeres, pero su incidencia en políticas educativas es marginal.
Llamado
La investigación urge a integrar saberes locales en currículos, desde textiles hasta agricultura sostenible; capacitar en perspectiva de género para combatir estereotipos en aulas; y fortalecer la educación bilingüe con recursos que equiparen el español y las lenguas originarias.