Necesaria la aprobación de la Ley de Aguas

El Gobierno Federal ha sentado las bases para la transformación del sistema agroalimentario y nutricional, pero todavía hay retos por atender, como elevar a rango constitucional la protección de los maíces nativos y otros alimentos de los que México es centro de origen y diversificación.

Aunado a ello, está el mandato para la producción de alimentos saludables sin transgénicos ni plaguicidas como los programas Sembrando Vida y Producción para el Bienestar, así lo señaló el subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, Víctor Suárez Carrera.

Llamó a la Cámara de Diputados a la aprobación de la Ley General de Alimentación Adecuada y Sostenible, validada por el Senado; asimismo, por la aprobación de la Ley General de Aguas, que implica un programa de largo plazo para la ampliación y tecnificación de las áreas de riego en el sur-sureste.

Manifestó que el gobierno ha operado un conjunto de programas para el campo, con apoyos directos sin intermediarios, y el objetivo central de lograr la autosuficiencia alimentaria, con transición agroecológica, con las dimensiones de salud y sustentabilidad.

Esos programas aplican al 100 por ciento sobre productores de pequeña y mediana escala, sobre quienes había antes el estigma de ser improductivos, cuando en realidad son los principales oferentes de los alimentos en los mercados nacionales.

De cinco millones de unidades productivas con actividad agropecuaria o forestal en el país, el 93 % tiene menos de 20 hectáreas y aportan el 54 % de la producción nacional, así como el 85 % del empleo rural.