La celebración del Día de Muertos es una de las tradiciones que se remonta a la época prehispánica, pero que se ha conservado de generación en generación y se ha luchado contra la mercadotecnia anglosajona, en busca de preservar lo nuestro.
Esa cultura consiste en que los niños salgan a las calles acompañados de sus padres a pedir dulces los días 1 y 2 de noviembre, que sin lugar a duda reanima el Día de Muertos, además se dice que esta costumbre es por dar culto a nuestros fieles difuntos.
Los cánticos y ceremonias son parte esencial de esta tradición, para ella en Tonalá se redoblar los esfuerzos para preservar la seguridad de los menores a través de la dirección de las autoridades locales.