La noche del 15 de septiembre es ampliamente conocida por la celebración del inicio del movimiento de independencia en México, pero también se ha convertido en una noche de fiesta en la que desfilan platillos y bebidas, típicos de la región.
Esta fecha se ha convertido en un verdadero festín y es un buen motivo para que las familias se reúnan y den el tradicional grito de independencia.
Variedad
Dentro de las comidas preferidas por los tuxtlecos se encuentran el pozole, la carne asada y los tamales.
En el caso de la carne de res, una de las comidas más representativas para esa fecha es la famosa “carnita asada”, cuya elaboración puede llevar un promedio de 800 pesos o más, dependiendo de las personas invitadas.
Juan Morales Sánchez, representante de los tablajeros, dio a conocer que para una familia de cuatro a cinco integrantes se requiere tres kilos de carne de res, más otros complementos como longaniza, chorizo, ubre, frijoles, ensaladas y un postre sencillo, para ello se estarían gastando un promedio de 800 pesos.
Otra de las opciones preferidas es la barbacoa de res o birria, “para prepararla, una familia podría gastar un promedio de 800 pesos, con tres kilos de carne (costilla) a con un costo de 140 pesos cada uno, junto a las hierbas de olor y chiles que resultan muy económicos, más complementos como arroz o frijoles”, informó.
Destacó que en este momento, su carnicería y tres más ubicadas en el mercado Juan Sabines, han bajado el precio de la costilla y la están ofertando en cien pesos por kilogramo.
“La carne para barbacoa ya la vendemos marinada para facilitar el trabajo de las amas de casa”, expresó.
Otra de las opciones preferidas por los chiapanecos es el cochito, el cual es un poco más económico en su preparación y resulta ser muy rendidor.
En este sentido, Rosario Reyes Cadena, vendedora de carne de puerco en este espacio, consideró que para que sea una buena celebración de “noche mexicana” esta carne es muy versátil, ya que se pueden elaborar: carnitas, pozole, costillas horneadas, tacos de cabeza, al pastor, de menudencia, así como otros platillos.
Para la elaboración de un buen cochito, para una familia de cuatro a cinco integrantes, se requiere dos kilos de hueso carnudo, con un costo de 80 pesos el kilo, más los ingredientes que salen muy económicos y los complementos, por lo que se requiere de un gasto promedio de 400 pesos.
Para elaborar un pozole se utilizan dos kilos de cabeza de puerco, más el maíz y otros ingredientes, siendo de los platos más rendidores; para una familia pequeña se ocuparía aproximadamente unos 450 pesos.
A pesar de la crisis económica, las familias no dejan de celebrar estas fechas importantes, se reúnen para disfrutar de esta variedad de alimentos que son representativos de la gastronomía chiapaneca y mexicana.