La instalación de retenes, operativos permanentes y la vigilancia policíaca/militar no han logrado frenar el ingreso de migrantes por la frontera sur del país, tanto que México tiene un nuevo récord de solicitantes de la condición de refugiado, con un incremento de 28.9 por ciento más que el año pasado.
De esa manera, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), en los ocho meses de este año (de enero a agosto), ha registrado 99 mil 881 peticiones de asilo, siendo Chiapas el principal estado en donde se realiza dicho proceso.
“Desde el 2021 se han registrado en el país más de 100 mil [solicitantes] al fin del año, pero nunca se habían rondado los 100 mil al cierre de agosto”, señaló el titular de la Comar, Andrés Ramírez Silva, quien además reconoce que se impuso una nueva marca —nunca antes vista— en ese proceso por el ingreso de extranjeros procedentes de más de 100 países.
La violencia, la inseguridad, los conflictos políticos y sociales, la falta de empleo y las afectaciones por el cambio climático son consideradas como las principales causas de la migración, por lo que en consecuencia se da el incremento de las peticiones de protección internacional en territorio mexicano.
Ante ese exponencial crecimiento en el ingreso de extranjeros a territorio nacional, las autoridades consideran que al final del año las solicitudes de refugio podrían superar las 150 mil, una cantidad nunca antes vista y, por ende, sería una nueva marca histórica.