Obreros de las comunidades de San Miguel primera y segunda sección, apoyados por Macayo primera sección, realizaron la mañana de este martes una manifestación pacífica frente a las instalaciones del complejo Cactus, procesador de gas en la ciudad de Reforma, en demanda de fuentes de empleo.
Solicitaron la intervención del presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, del gobernador del estado, Rutilio Escandón Cadenas, y del director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, para dar solución.
Encabezados por los líderes sindicales de ambas comunidades, los obreros desempleados exigieron a Pemex la liberación de los contratos de obras de mantenimiento, además de la generación de empleo que mejore las condiciones de vida de los habitantes de las comunidades aledañas al complejo procesador de gas.
Desde las 07:00 horas, cientos de trabajadores se plantaron frente a la puerta principal de las instalaciones petroleras, donde permanecieron por espacio de varias horas hasta ser atendidos por funcionarios de Pemex, quienes prometieron elevar sus demandas a las oficinas centrales en la Ciudad de México para ser atendidas.
El representante legal y vocero del sindicato cetemista, Francisco Ruiz Olán, dijo que están cansados de que sus demandas no sean escuchadas y que funcionarios menores obstruyan sus peticiones manteniéndolos engañados, para que no sean escuchadas por funcionarios competentes que puedan dar solución.
El representante social señaló que la falta de inversión para el mantenimiento de las instalaciones petroleras en ese complejo ponen en riesgo de explosión algunas áreas, y por ello los habitantes de las comunidades cercanas desde hace tiempo viven con la constante zozobra de que pueda suceder una tragedia; asimismo, redundó en la vulnerabilidad de sus derechos y en una oportunidad de empleo.
También solicitó la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador, del gobernador Rutilio Escandón y del director general de Pemex, Octavio Romero Oropeza, para dar resolver los problemas.
Según señalaron los obreros, están dispuestos a reunir a más comunidades para un bloqueo total al complejo Cactus en caso de no obtener respuesta favorable.
Con documentación en mano, la cual se han dado a la tarea de investigar, mostraron a funcionarios de Pemex cómo desde el año pasado los contratos para que compañías realicen los trabajos de mantenimiento han sido suspendidos o cancelados en repetidas ocasiones.
El mantenimiento al sistema de aire acondicionado y al cuarto de control mecánico, que se presumía llegaría a la planta de Cactus, fue cancelado, mientras que los trabajos de mantenimiento a intercambiadores de calor, calderetas y condensadores en Nuevo Pemex están suspendidos, lo que representa una “bomba de tiempo” en esas instalaciones, a pesar de que la fecha de fallo está señalada en el documento para el 20 de septiembre.
Desde diciembre no se ha logrado dar inicio a las obras, por lo que decidieron manifestarse, dijo el vocero oficial de las comunidades, quien resaltó que el ejido San Miguel -donde se encuentra asentado el complejo petroquímico- depende laboral y económicamente de las instalaciones petroleras, ante la improductividad del campo que ha sido afectado por la contaminación de la lluvia ácida.
Los representantes obreros entregaron el oficio a funcionarios de Pemex para que lo hagan llegar a las oficinas centrales y le den pronta solución; caso contrario, señalan que volverán a manifestarse con más gente y mayor rigor.
Por otra parte, cientos de trabajadores petroleros provenientes de otros estados se quedaron varados por varias horas sin poder ingresar al complejo hasta que los manifestantes liberaron el paso al interior de las instalaciones.