El secretario de Salud de Chiapas, Francisco Javier Paniagua Morgan, reconoció que el sistema de hospitales públicos opera con una sobreocupación arriba del 100 por ciento, debido al compromiso de no dejar sin atención a ningún paciente.
En entrevista, el funcionario estatal admitió que la red de hospitales públicos de la entidad no tiene las certificaciones de las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) que deben cumplir, porque “si actuáramos como dice la norma, rechazaríamos enfermos y eso no podemos permitirlo”.
Paniagua sostuvo que sobre la red de hospitales estatales, se aplican todas las NOM que deben cumplir estos establecimientos sanitarios, pero reveló que, por ejemplo, una dificultad para cumplirlas en su totalidad, implicaría mantener los hospitales al 80% de su capacidad para recibir y atender enfermos, reservando 20% para casos graves.
Ello significaría que se rechazarán a cientos de pacientes que llegan a solicitar consultas, atención médica especializada, medicamentos y estudios especializados.
Aunque no precisó qué tan arriba del cien por ciento de ocupación operan los hospitales, sí mencionó que todos los días, los hospitales de Tapachula, Ocosingo, Palenque y Tuxtla Gutiérrez, operan a su máxima capacidad y con servicios de emergencia saturados por la demanda creciente.
Paniagua señaló además que en parte, este efecto de sobreocupación se registra porque instancias como IMSS, Isstech e Issste, refieren pacientes hacia el sistema estatal de salud y el compromiso de las autoridades sanitarias es “no dejar a nadie sin atención”.
El secretario de Salud reconoció una insuficiencia en cuanto a la infraestructura hospitalaria, además del poco interés de los médicos recién egresados por llegar hasta las comunidades donde un Centro de Salud podría generar un diagnóstico temprano, un expediente clínico acertado y reducir la demanda que se registra en las ciudades.
Puso de ejemplo el hospital general Rafael Pascacio Gamboa, donde todos los días se registra un promedio de 400 casos de urgencias de atención obstétrica: desde mujeres que llegan convulsionando al momento del nacimiento del bebé, o sangrando, hasta quienes comienzan con los trabajos de parto, dijo.
“Realmente entiendo el sentir de la población, lo entienden los compañeros médicos que trabajamos en el sistema de Salud, pero nos vemos rebasados”, reconoció.
Primera Unidad de Terapia Intensiva Obstétrica
El secretario de Salud del Gobierno del estado anunció que para próximas fechas, en el hospital general Pascacio Gamboa se abrirá la primera Unidad de Terapia Intensiva Obstétrica del sureste del país, así como cinco quirófanos que fueron totalmente rehabilitados, “para tener mayor capacidad de atención”, concluyó.