Razón, Autonomía y Derecho A.C (Orgrauder), se unió a diversas organizaciones de la sociedad civil, para denunciar una pronta intervención de las autoridades y se eviten hechos lamentables en la comunidad Tzajalch’en, en Chenalhó.
“Se vive bajo amenaza. Niños, mujeres y hombres temen un ataque armado inminente mientras grupos armados se posicionan en sus accesos. Organizaciones piden a defensores de derechos humanos nacionales e internacionales intervenir de forma urgente. No se puede permitir otra masacre en silencio”, expusieron.
La organización sin fines de lucro, fue fundada con el propósito de salvaguardar y promover la autonomía personal y el libre desarrollo de la personalidad. Nuestra misión es llevar a cabo diversas acciones orientadas a la defensa y promoción de los derechos humanos, entendidos como prerrogativas inherentes a la dignidad humana, cuya efectiva realización es esencial para el desarrollo integral de cada individuo.
Comprometidos con proteger el derecho de los consumidores, así como asegurar que las personas puedan ejercer libremente sus decisiones en un entorno de respeto y equidad.
Las Abejas de Acteal alertaron desde el pasado 8 de junio sobre la presencia de grupos armados e intimidaciones en dicha comunidad.
Cabe señalar que el pasado 30 de abril la comunidad celebró sus 50 años de fundación y que en los inicios del conflicto armado, en 1994, se estableció como campamento civil por la paz.
Asimismo, se han denunciado las diferentes omisiones del estado que se han vivido de manera constante tanto en la comunidad como en la zona. Por tal razón, en agosto del año 2024, la comunidad, junto con Las Abejas de Acteal, efectuaron una jornada de ayuno y oración por la paz para pedir un alto a la violencia.
Por lo anterior, el pasado 30 de abril, tanto las familias integrantes de las Abejas de Acteal que viven en Tzajalch’en como el resto de la comunidad, han comenzado a sufrir distintas amenazas e incriminaciones por parte de las autoridades.
Denunciaron que el día 8 de junio del presente año, aproximadamente a las 6 de la tarde, hubo detonaciones de armas de fuego. Los disparos se efectuaron desde un monte que se ubica alrededor de 400 metros de la escuela e iglesia católica de la comunidad.
