Palenque, 17 especies en riesgo de desaparecer

La reserva del Parque Nacional de Palenque, un espacio con un millón 771.95 hectáreas, cumplió este lunes 20 de julio, 39 años como zona protegida debido a que en 1981 el Gobierno Federal emitió el decreto para tal efecto, lo que abona al reforzamiento de trabajos de prevención, cuidado de la flora y la fauna del lugar, así lo revela la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegida (Conanp).

No obstante, el lugar enfrenta retos mayúsculos y dentro ellos está la conservación de 17 especies que se ubican bajo el concepto de amenazadas o en peligro de extinción, la gran mayoría se debe a la actividad humana, por la destrucción del hábitat o la caza furtiva.

Solamente en la parte de amenaza se encuentran el loro cabecipardo y cabeza azul; el búho de anteojos, el tucán, carpintero castaño, el azulejo, y el jaguarundi se suman a la lista; al borde de la desaparición están: el gavilán solitario, el aguilucho, el búho, el tlacuache dorado, mono araña, saraguato, tigrillo, mono aulllador, ocelote y el viejo de monte.

La Conanp remarca que Palenque es un espacio que da lugar a uno de los patrimonios arqueológicos más importantes que tiene Chiapas, ya que en gran parte de la ahora zona protegida se encuentran vestigios que formaron parte de la cultura maya; además, la extensión de tierra, con el paso de los años, sufrió una transformación que se reflejó en los ecosistemas.

Para determinarse como una área protegida, cumplió con la parte de la importancia cultural y medioambiental, debido a que su flora y fauna es única, los recursos naturales del lugar se pueden aprovechar de forma sustentable y además, todo el paisaje permitió que se convirtiera en una zona ideal para el turismo.

Chiapas es uno de los estados que posee la mayor riqueza posible en cuanto a especies se refiere.

Para el caso del Parque Nacional de Palenque, es la selva alta perennifolia la que predomina en la vegetación; sin embargo, también tiene a la canshan, chicle, corcho negro, frijolillo y Ramón, como la flora más representativa.

La ardilla, el tepezcuintle, el gavilán nevado y la bejuquilla verde, son animales representativos.

Aunque el lugar permite actividades de recreación y turismo, también funge como factor en la regulación del clima y ahí también se hacen recargas de los acuíferos.

La Conanp remarca que en la parte socioeconómica, los índices de marginación para los habitantes que viven en la cercanía son muy elevados.

Algunas estadísticas que comparte la dependencia federal, es que el turismo, la agricultura y la ganadería son los rubros que permiten la generación de ingresos económicos.

Incluso, a través de la asociación de hoteles que opera en la zona, se tienen disponibles casi dos mil habitaciones para los habitantes que, en su mayoría, disfrutan de las ruinas de Palenque.

Adicional a la fauna que está en amenaza o peligro de extinción, otros problemas que enfrenta la reserva son los incendios forestales, extracción de la vida silvestre, asentamientos irregulares de personas, cacería furtiva, ganadería extensiva y la contaminación del suelo y del agua.