El recién nombrado obispo de Tapachula, monseñor Luis Manuel López Alfaro, confirmó el 27 de junio próximo tomará posesión de su nuevo cargo ante la presencia del nuncio apostólico en México, Joseph Spiteri.
En rueda de prensa dijo que “con el nuncio quedamos que tomaré posesión el 27 de junio, un día interesante porque es la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús. Un día antes, el 26 llegaré a Tapachula”.
Adaptación
Agregó que “nos toca llegar y conocer, ubicarse porque es otra realidad a la de la montaña, pero lo importante es llegar sobre todo a escuchar y conocer”, principalmente el tema migrante.
“En la diócesis de Tapachula llevan ya un camino y a mí me toca acompañar ese camino. No es que uno llegue a poner cosas o a quitar, sino a acompañar el trabajo que lleva la diócesis, impulsar y también atender lo que el Papa Francisco nos pide; somos parte de la Iglesia y el Papa ha dado líneas muy interesantes para poder caminar”, sostuvo
El sacerdote Agripino Méndez, administrador diocesano de Tapachula, manifestó que el plan principal “es que como dice él, es que nos siga acompañando y como un signo muy importante de la diócesis porque para nosotros los municipios de la Sierra representan una realidad distinta a la de la costa, casi parecida a las de la diócesis de San Cristóbal”.
Salida
Explicó que López Alfaro saldrá de San Cristóbal el 26 de junio por la ruta de Comitán, misma que hizo el obispo Felipe Arizmendi Esquivel cuando tomó posesión como obispo de San Cristóbal el 1 de mayo del 2000.
“Como don Felipe subió por ahí, queremos que don Luis Manuel baje por ahí, es la vuelta y es simbólico porque sabemos que la situación de la violencia está más difícil en municipios de la Sierra, pero esperamos que no esté tan violento”.
Precisó que será esperado en la primera parroquia de Tapachula, la que está en el ejido Guadalupe Victoria, municipio de Amatenango de la Frontera.
López Alfaro expresó que en la diócesis de San Cristóbal, a la cual llegó hace 20 años procedente de Toluca, Estado de México, aprendió bastante y con lo que el Papa Francisco le está pidiendo a la Iglesia es lo que aquí se vive desde hace tiempo.
Manifestó que para la iglesia “son una prioridad la niñez y los jóvenes, hoy vemos que más vulnerables por la violencia, el crimen organizado y la división de las familias. Trabajamos y estamos cerca de ellos para ayudarles a que tengan clara su identidad de ser humano y en su dignidad porque si eso no está claro no habrá nada claro”.