El Gobierno Comunitario de Chilón, en el marco del proceso electoral de 2024, realizó un pronunciamiento para exigir su reconocimiento como pueblo autónomo; además, aprovecharon para reflexionar sobre la división y el sometimiento ocasionado por los partidos políticos.
Sistema alternativos
Desde Chilón, el Gobierno Comunitario del municipio, perteneciente al pueblo originario tseltal, surgió hace más de seis años con el objetivo de crear un camino alternativo al sistema de partidos políticos.
Hoy, mantienen 11 centros de atención distribuidos en todo el municipio: Bachajón, Palma Xanahil, Patwits, San Antonio Bulujib, Ch’ich’, Ahlan Sac Hun, Lázaro Cárdenas, Pamanabil, Sacun Palma, San Jerónimo T’ulilh’a y Chilón.
En todas la sedes, el gobierno ha tenido la oportunidad de escuchar a la gente e informar sobre la propuesta de lucha y vida.
El gobierno aprovechó el evento para expresar su dolor e indignación ante las problemáticas que se siguen viviendo en las comunidades y cómo las enfrentan sus hermanos y hermanas.
“Constatamos que ha aumentado la venta clandestina de alcohol y de drogas en las comunidades, lo cual provoca la muerte de inocentes y la destrucción de las familias. Advertimos con preocupación el aumento de las células del crimen organizado coludidas con el sistema de partidos políticos”, comunicó.
Parten, dividen y someten
El gobierno denunció los modos corrompidos de proceder de los partidos políticos, llegando al grado de repartir cerveza en sus eventos, alcoholizando y manipulando a la ciudadanía.
“Lo dijimos desde el principio y lo repetimos, los partidos parten, dividen y someten al pueblo. Al ver y sentir en el corazón el sufrimiento de nuestras comunidades, manifestamos con contundencia que seguiremos construyendo caminos de vida desde nuestra autonomía. Hoy ratificamos que como pueblos indígenas somos llamados a luchar por el derecho a la libre determinación y así fortalecer los orígenes de nuestros pueblos”, informó.
En síntesis, el gobierno reiteró su intención de promover lo colectivo frente a lo individual, defender las raíces culturales frente al despojo de su identidad, luchar por la Madre Tierra ante la amenaza extractivista.
Por último, exigieron el reconocimiento al ejercicio de sus derechos como pueblos indígenas. Demandaron respeto a los derechos del territorio y a la Madre Tierra, así como a la consulta previa e informada para los pueblos originarios. También a la vida digna para las niñas, niños y jóvenes, además del rechazo absoluto a la militarización de sus pueblos y territorios.