La agrupación Melel Xojobal hizo un llamado a la alcaldesa morenista de San Cristóbal, Fabiola Ricci Diestel, a “detener la persecución y criminalización de la niñez trabajadora y sus familias” en el centro histórico de la ciudad.
En un comunicado, denunció que las nuevas autoridades municipales que iniciaron funciones hace menos de un mes, han retirado de la vía pública a cientos de familias que trabajan vendiendo artesanías, alimentos y juguetes en el centro de la ciudad.
“Hemos documentado que desde los primeros días de gobierno del actual Ayuntamiento, inspectores de Servicios Públicos Municipales en coordinación con la Policía Municipal han retirado de la vía pública a los vendedores”, agregó
Señaló que, “de acuerdo con testimonios de niñas, niños y adolescentes trabajadores y sus familias, desde el 11 de octubre, integrantes de estas dependencias les han prohibido ocupar sus puestos habituales de trabajo ‘reubicándoles’ en lugares con poca iluminación y baja afluencia de transeúntes, bajo el argumento de mejorar la imagen urbana”.
La agrupación que desde hace 27 años trabaja con infancias y adolescentes, afirmó que “les han decomisado mercancías de forma ilegal y les amedrentan constantemente con desalojarlos mediante el uso de la fuerza. A las familias les han dicho que serán sancionados si llevan a sus hijas e hijos a los puestos de trabajo ‘porque se ven feos’ y a las niñas, niños y adolescentes les hostigan diciendo que no pueden trabajar por ser menores de edad”.
“Desde el Melel Xojobal expresamos nuestra preocupación ante estas acciones de criminalización y discriminación de la niñez trabajadora impulsadas desde el ayuntamiento, ya que vulneran su interés superior y les exponen a mayores riesgos que atentan contra su seguridad, sin ofrecer alternativas para mejorar la protección y garantía de sus derechos”, manifestó.
Recordó que en San Cristóbal, “el 72 por ciento de las niñas, niños y adolescentes viven en situación de pobreza, lo que equivale a cerca de 60 mil personas. Ante esta realidad, miles de familias trabajan junto con sus hijas e hijos en espacios públicos como calles, plazas, andadores y mercados”.