Tomando en cuenta que el tema del agua se ha convertido en una agenda mundial, a tal grado de que en algunos lugares se presenta escasez, el titular de la Secretaría de Protección Civil en Chiapas, Luis Manuel García Moreno, confirmó que las plantas de tratamiento de aguas residuales (PTAR) en la entidad están operando a un 12 % de su capacidad, un porcentaje considerado muy bajo.
Cuerpos de agua
Otro problema que se enfrenta, es que también se están contaminando los cuerpos de agua. Por eso es necesario que esos asuntos se puedan contrarrestar a través de la educación y las múltiples formas de preparación con las que cuenta la Escuela Nacional de Protección Civil (Enaproc).
Muchos de los desastres que ocurren —refirió— giran en torno al agua; en algunos casos, por la falta del líquido, y en otros por la abundancia (con el exceso de lluvias). García Moreno explicó que la idea de llevar a cabo los trabajos preventivos es para cuidar este insumo (esencial para la vida) para las nuevas generaciones.
Objetivos
Recordó que los objetivos en materia de protección civil son tres: proteger la vida, el patrimonio y el medio ambiente. Se trabaja, además, con los tres sectores del gobierno, también con la parte privada y social.
En Chiapas se ha trabajado para organizar, capacitar y equipar a los Comités Comunitarios de Protección Civil que están integrados por personas voluntarias, que están al pendiente de las vulnerabilidades que puedan ocurrir en la entidad.
El secretario de Protección Civil en el estado descartó que a nivel local, al menos en este año, se pudiera enfrentar una crisis en el tema del agua. No obstante, destacó el manejo responsable que hay de las presas hidroeléctricas y en las que también participa el gobierno local.
“No hay riesgo de desbasto de agua, pero sí encontramos un problema de tratamiento de las residuales”, agregó. No todas funcionan y en el diagnóstico se encontró que se debe a que en los municipios falta la capacitación. Por eso es que se tiene una oferta educativa que permitirá encontrar soluciones a los organismos operadores de agua.
Comentó que la implementación de las políticas públicas tiene que ir acompañada de acciones de gobierno con verdadera participación ciudadana. En la entidad hay cerca de 326 plantas de tratamiento, apenas están en funcionamiento unas 116, es decir, que hay un tema pendiente que resolver, pero se requiere de mayor capital humano.