Tomando en cuenta la cantidad de tiempo que puede tomar para que los plásticos se fragmenten (entre 150 y 500 años), Elisa Villers de Coss, a cargo del departamento de Extensión y Transversalidad, de la Dirección de Gestión, Investigación y Educación Ambiental en la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn), comentó que una familia en México puede llegar a utilizar miles de bolsas de plástico al año, a pesar de que se ha legislado para reducir el consumo de estos productos.
Los plásticos de un solo uso, relató, alcanzaron popularidad en los años de 1970, sin embargo, en la actualidad hay estudios, dijo, que señalan que de todo el petróleo que se extrae en el mundo, un 5 % está destinado a la industrialización de esta materia que, comúnmente, se ven en popotes, platos, vasos desechables o cubiertos.
El proceso de fragmentación de los plásticos, añadió, puede llegar a cualquier espacio; incluso a los océanos que son de los principales afectados y eso conlleva otro riesgo que se vincula con que algunos peces coman los microplásticos y, a su vez, los seres humanos que consumen esos animales.
Fue a partir de 2019 que en Chiapas se impulsó la Ley de Residuos para la entidad y municipios; esa actualización incorporó que se lleven a cabo acciones para reducir el consumo de esos productos y prohibir su distribución.
Al citar al Instituto Nacional de Cambio Climático, comentó que en nuestro país una familia usa, en promedio, unas 30 bolsas por semana. Ahora se ha notado que en los supermercados no se entregan estos artículos y eso ayuda para reducir el consumo de esos productos.
No obstante, reconoció que existen otros esfuerzos que se pueden hacer desde la parte institucional y de la participación ciudadana, debido a que el cuidado del medio ambiente y de la salud es una responsabilidad compartida.
En la parte institucional, relató, en el Zoológico Miguel Álvarez del Toro se puso en marcha los días martes sin plásticos de un solo uso, con el propósito de que se genere sensibilización sobre la problemática que existe con estos temas.
Villers de Coss comentó que el propósito es que se pueda estar libre de plásticos de un solo uso, tomando en cuenta que existen alternativas para ir cambiándolos por hábitos más responsables.