Cientos de pobladores del municipio de Zinacantán, retuvieron siete autobuses en los que se transportaban alrededor de 400 estudiantes normalistas que poco antes presuntamente habían saqueado una tienda Oxxo y algunas unidades repartidoras de refresco y frituras, informaron fuentes gubernamentales.
Añadieron que los alumnos llegaron a la cabecera de Zinacantán la noche del jueves a las 21 horas, aproximadamente, donde tiene la sede la Escuela Normal Intercultural Jacinto Canek, procedentes de Tuxtla Gutiérrez, luego de realizar un bloqueo en la carretera de cuota que comunica a San Cristóbal con la capital.
Los pobladores argumentaron que los hechos “vandálicos” que han realizado desde hace varios años ocasionan problemas al municipio y “dañan su imagen”. Al quedarse sin transporte, los normalistas caminaron diez kilómetros para llegar a San Cristóbal.
Las fuentes señalaron que los alumnos de la Jacinto Canek y de otras escuelas normales llegaron a la cabecera de Zinacantán alrededor de las 21 horas y fueron interceptados por cientos de pobladores que amenazaban con quemar las unidades, tres de la institución educativa y cuatro de la empresa Omnibús Cristóbal Colón, con la que los estudiantes tienen un convenio para que les facilite autobuses para movilizarse a cambio de respetar sus propiedades.
Dijeron que los pobladores de Zincantán amenazaban con quemar las unidades, en cuyo interior se encontraban los estudiantes, hasta que más de una hora después arribó el alcalde Manuel Martínez Jiménez, quien se encontraba en la capital del estado, y los convenció de que liberaran a los normalistas y que los camiones quedaran “en garantía”.
Señalaron que enseguida los alumnos descendieron de las unidades y se trasladaron a pie a San Cristóbal, distante a diez kilómetros.
El Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de Las Casas (Frayba) emitió la mañana de este viernes, una “acción urgente”, en la que aseguró que los 400 normalistas de la Escuela Rural Jacinto Canek “fueron parados a la salida de la cabecera municipal por aproximadamente 70 integrantes armados del municipio de Zinacantán, quienes los retuvieron entre seis y ocho horas”.
Sostuvo que “los amenazaban con armas, que iban a quemar los autobuses y dispararon al aire para infundir temor”.
Un funcionario del ayuntamiento de Zinacantán aseguró que una vez que los alumnos descendieron de las unidades, los pobladores encontraron en su interior, 50 docenas de cohetes, palos, piedras, resorteras, refrescos y otros productos.