Tras las últimas lluvias presentadas en la capital, los baches se hacen cada vez más profundos y las alcantarillas se llenan de basura o bien se colapsan, como en el caso de la ubicada en la primera Sur y segunda Oriente de Tuxtla Gutiérrez.
La alcantarilla tiene una función vital en drenar el agua que se puede estancar en la calle y que podría afectar a los negocios cercanos, sin embargo, ante la falta de la reposición de una, las familias cercanas han decidido colocarle diferentes objetos para que los vehículos y personas eviten caer al vacío.
Según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública (ENSU) realizada por la Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi), en su última publicación a marzo de 2020, el porcentaje de la población de 18 años y más que durante marzo de 2020 identificó problemáticas en su ciudad y que en el caso de Tuxtla Gutiérrez, fue del 99.3 por ciento.
Dentro de las mayores problemáticas, los baches en calles y avenidas con 76.5% rebasa al de la delincuencia (robo, extorsiones, secuestros, fraudes, etc.), 63.9%, seguido de alumbrado público ineficiente (60.1), fallas y fugas en el suministro de agua potable (47.4), calles y avenidas con embotellamientos frecuentes (45.3), coladeras tapadas por acumulación de desechos (41.7), servicio de transporte público deficiente (40.4), parques y jardines descuidados (37.2) y deficiencias en la red pública de drenaje (30.5).
Al respecto, Tapachula tuvo un porcentaje de la población de 18 años y más que durante marzo de 2020 identificó baches en calles y avenidas con 89.3%; la más alta del sureste mexicano, sólo por debajo de Villahermosa (90.9). A su vez, Tuxtla Gutiérrez llegó a 83.4%.
La población que participó en este ejercicio colocó a Tuxtla Gutiérrez con 18.9% como de las ciudades con menor efectividad del gobierno para atender problemáticas, seguido de Tapachula con 27.1%.