Eliseo Trinidad Hernández, académico y defensor de derechos humanos, consideró que la llamada “narcocultura” vaya en incremento de forma preocupante en los últimos tiempos, e incluso se traduce en hechos de violencia cada vez más visibles en gran parte del país
El académico destacó la preocupación por el caso estatal, pues va al alza la comercialización de “narcocorridos”, gorras con siglas de cárteles u otros objetos que exaltan a algunos personajes “oscuros” que son admirados por el mismo pueblo.
Grupos poblacionales locales de alguna forma está adoptando la parte negativa y social de los grupos delictivos del norte de México, “es como decir que nos estamos anorteñando, y eso es grave”.
“Eso es un problema cultural, pero ahí las autoridades tienen la obligación constitucional de elaborar, como lo debe hacer cada seis años, su Plan Estatal de Desarrollo, en el que se diseñen estrategias, políticas públicas y también genere partidas presupuestales y cumplir con las mismas” para combatir ese tipo de males.
Aunque lamentó que estas opciones se quedan en el discurso, “siempre se habla de derechos humanos, de la dignidad humana, pero no se aterrizan en la realidad, en el ciudadano de a pie que se siente inseguro”, dijo Trinidad.
A todo el contexto se le suma el tema de la inseguridad, “porque esa gente se pasea armada, hay más tiroteos, persecuciones, y lugares que antes eran tranquilos, hoy están amenazados, son acosados para pagar derecho de piso”, incluso los lugares turísticos importantes para la economía.