La Fundación “Gonzalo Río Arronte”, en coordinación con el Fondo de Conservación “El Triunfo” y otras organizaciones de la sociedad civil, presentaron el “Plan de manejo integral de microcuencas”, con el cual se busca contrarrestar las problemáticas del “Programa para el Manejo Integral del Agua en Chiapas”.
Describieron que para su elaboración se realizaron 93 encuestas, 31 entrevistas, 16 talleres de diagnóstico y validación, 36 mapas de interpretación y propuestas de acción, lo que trajo como resultado 10 documentos impresos que ya fueron entregados al Ayuntamiento y a las comunidades, donde se detallan las problemáticas detectadas y los planes de acción.
Esto, gracias a la colaboración de más de 100 personas que viven en las comunidades que se encuentran dentro de la Reserva de la Biósfera El Triunfo.
“Este documento es el resultado de varios años de trabajo, en donde se recorrió el territorio de la microcuenca, se conocieron sus fuentes de agua, se habló y escuchó a sus pobladores, se identificaron sus actividades, sus necesidades y preocupaciones”, detalla el informe.
Este documento, dicen, tiene la finalidad de visualizar el futuro de las microcuencas de la reserva, con planes para proteger y conservar los recursos naturales, al mismo tiempo que se concientiza sobre un uso sustentable de estos, sin comprometer a las generaciones futuras ni la economía de los habitantes.
El trabajo para proteger la superficie de 119 mil 177 hectáreas, busca un trabajo coordinado y estratégico, con el respaldo del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), The Nature Conservancy (TNC) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
Quienes en conjunto buscarán fortalecer la calidad de vida de los 400 mil habitantes localizados a lo largo de la Sierra Madre de Chiapas.
Afirman que “este programa incluye el conocimiento de las necesidades que presenta la población y propuestas de acción en las que se prioriza a las zonas más vulnerables de la microcuenca”.
El reto más grande, destacan, es la percepción actual del uso de los recursos naturales, la cual está enfocada en la satisfacción de las necesidades del momento, sin conciencia alguna de las demandas de la población futura.
Además de las prácticas ecológicas que dañan al medio ambiente, como el 46 % de la población que acostumbra a quemar su basura, emitiendo gases que pueden ser nocivos; mientras que el 22 % lo desecha en lugares al aire libre. Aunando la contaminación del agua y la tala de árboles.
“Resulta urgente plantear propósitos que paulatinamente permitan un mejor aprovechamiento de los recursos, a fin de no comprometer el bienestar de las generaciones futuras”, subrayó la justificación del plan.
El documento es amplio y detallado, cuenta con 96 páginas, en las cuales se describen las problemáticas y se proponen sus soluciones.