Ante la persistencia de presuntos actos violatorios a los derechos humanos de los internos al interior del Cefereso núm. 15 “CPS Chiapas”, ubicado en Villa Comaltitlán, atribuidas al personal directivo y de seguridad, familiares de los procesados anunciaron que mantendrán movilizaciones y solicitudes al Gobierno Federal, a la CNDH y a la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, para que sean atendidos.
Los declarantes señalan que no quieren privilegios ni acusar a nadie en particular, solo buscan condiciones de alimentación adecuada, atención médica oportuna y facilidades para las visitas de familiares, toda vez que la población penitenciaria de este Cefereso núm. 15 es originaria, en su mayoría, de los estados de San Luis Potosí, Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas, Guerrero, Puebla, Sinaloa, Estado de México y Baja California.
Realizaron plantón
Recordaron que recientemente realizaron un plantón en la Ciudad de México, en el que estuvo presente Raymundo Ramos Vázquez, representante del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo AC. Se informó que se presentó una queja urgente por las acciones graves violatorias a los derechos humanos de los internos, mismas que han sido detalladas en escritos y en los que exigen la destitución de la directora del Cefereso 15, Erika Adriana Tenopala Chaussee, y del jefe de Seguridad, Pablo Guillén Morales, responsables de las irregulares condiciones en ese centro penitenciario.
En el escrito dirigido al gobierno federal, así como a la presidenta de la CNDH, María del Rosario Piedra Ibarra, expresan su inconformidad por las supuestas irregularidades que han creado susodicha inconformidad y que originó la huelga de hambre del 4 de julio de 2022, cuando un centenar de hombres de tres módulos realizó una protesta pacífica para llamar la atención del Gobierno Federal.
A esta acción le antecedió una huelga de hambre al interior de los seis módulos, la cual fue suspendida cuando directivos cancelaron las visitas familiares e íntimas de los manifestantes.