Líderes sociales consideran que Chiapas merece vivir en paz, y que la suspensión temporal de eventos con peleas de gallos y carreras de caballos es una medida en la actualidad temporal que deberá evaluarse en los rubros del entorno en que estos se desarrollan, porque el clamor social es que se generen climas que permitan a las familias de Chiapas vivir en la tranquilidad.
En entrevista el presidente de la asociación civil Nueva Generación Vinculación Social, Alfredo de la Cruz Cordero, expuso que gran parte de la población no está en contra del decreto que prohíbe de manera temporal estas actividades en Chiapas, y que es promovida por el gobernador Eduardo Ramírez Aguilar; mientras que por otra parte, quienes están a favor son grupos identificados con la crianza de estos animales, esto implica que es mucho mayor sector apoya esta decisión de la suspensión.
Expuso que el tema prioritario en Chiapas es la paz y la seguridad de la población, situación que puso en grave riesgo a toda la sociedad en los últimos años y que llevó a vivir en la incertidumbre y la zozobra; por lo que dijo, es necesario que se tomen medidas adecuadas para regularizar el estado de derecho, toda vez que la sociedad tiene conocimiento de que en las peleas de gallos o carreras de caballos ha habido enfrentamientos que han dejado saldo rojo.
Por su parte, José Antonio Chol, del bloque de organizaciones de izquierda, dijo que la medida tiene fundamento, toda vez que en algunos municipios de la costa de Chiapas hay antecedentes de enfrentamientos en palenques de gallos como ha ocurrido en Mapastepec y Villa Comaltitlán, por los que aún existen carpetas de investigación.
Muchos de los eventos se han manejado de manera clandestina, bajo argumentos de que son eventos con causa para ayuda a instituciones escolares o los mismos ejidos y que son autorizados por las autoridades ejidales con anuencia de instituciones federales, había apuestas, venta de alcohol e incluso uso de armas de fuego que sin lugar a duda siempre había el temor de que algo pudiera ocurrir
El problema es el entorno de violencia que se da en los eventos, reconocen que los criadores, empresarios palenqueros y aficionados no son delincuentes, no cometen delitos, pero consideró que el tema es la paz social, la seguridad que requiere la entidad y que poco a poco se está recuperando.