"Cada año se vuelve más complicado tener un alto rendimiento en la producción de maíz debido a factores como la variabilidad climática, las plagas que son cada vez más resistentes, el precio de los insumos que no dejan de subir, el precio de garantía", manifiesta Candelario Molina Guillen, productor chiapaneco.
El agricultor de la región de Venustiano Carranza, comentó que, el año pasado el precio de garantía fue de siete mil 50 pesos y para este quedó en seis mil, lo que afectó de manera importante a los productores porque la inflación se ha mantenido, dejando márgenes de ganancia muy bajos.
Escasez de mano de obra
Un problema fuerte, dijo, en su región y casi todo el estado, es la escasez de mano de obra, porque los jóvenes ya no quieren dedicarse al campo, una vez que terminan sus estudios se quedan trabajando en las ciudades y no regresan a sus tierras, lo que dificulta más la producción.
Los pequeños productores no tienen la facilidad de comprar maquinaria como tractores y otros para facilitar la cosecha. En el grupo al que pertenece, de 18 productores, tienen entre dos y cinco hectáreas para cultivar y todo lo tienen que trabajar con mano de obra.
Manifestó que el programa de entrega de fertilizante del Gobierno Federal es bueno, pero insuficiente. "Se reconoce el trabajo y esfuerzo para ayudar a los productores, porque antes no recibían nada, pero la realidad es que el insumo que entregan no alcanza ni siquiera para fertilizar una hectárea", apuntó.
Mencionó que la mayor parte del maíz que se produce en su región y zonas aledañas se va hacia la frontera, es comprado desde Guatemala, ahí prevalece el coyotaje.
"Cuando empezaron Segalmex todavía no abría su bodega y compraban en cinco mil pesos la tonelada, pero ya se igualaron con Segalmex, ahora los productores buscan que haya flujo de efectivo y el coyote paga al momento, mientras que Selgamex tarda 15 días o hasta un mes para pagar porque piden muchos requisitos", declaró.
