Productores se resisten al uso de transgénicos

Productores de maíz y soya del Soconusco están preocupados por la aprobación de granos transgénicos en México.

En el campo chiapaneco hay resistencia al uso de este tipo de cultivos por los riesgos y el impacto negativo a la agricultura, señalan que esto ahogará la crisis agrícola en Chiapas y dañará aún más el suelo y la biodiversidad.

A la deriva

En entrevista Jorge Arroyo Ruiz, productor de granos del Soconusco, afirmó que el campo está a la deriva, luego de que el gobierno permitió la entrada de granos transgénicos al país sin impuestos, una medida que sacrifica el esfuerzo de los productores locales y los deja en la bancarrota.

Expuso que el uso de semillas transgénicas pone en riesgo los granos tradicionales que por años han conservado los productores y además dañaría aún más el suelo, que ha sufrido por la deforestación; la situación actual de los productores de granos en la región Soconusco es alarmante, la cual se debe a la ingobernabilidad de las autoridades en este rubro, pues, durante todo un sexenio quedaron en el olvido.

“La falta de recursos y las condiciones climáticas han puesto en peligro cultivos como el maíz y soya en el Soconusco, por ello la negativa de nosotros los productores contra la entrada de semillas transgénicas, porque la consideran perjudiciales al medio ambiente y además pondrían en riesgo a granos tradiciones que nos ha costado preservar”, abundó.

Costos a la alza

El agricultor también reveló que los precios que reciben por sus cosechas han caído drásticamente, mientras que sus costos de producción han aumentado significativamente, sumando todos los castigos que el comprador establece ante la falta de un regulador, en este caso las autoridades.

 “El flete subió 250 pesos por tonelada, la trilla aumentó 900 pesos por tonelada, nuestros costos se incrementaron en un 100 % y nuestra producción bajo, no existe una sola institución que regule, que proteja de parte del gobierno, tenemos una ingobernabilidad”.

La falta de aseguradoras que protejan a los agricultores ha agravado la situación, lo que ha llevado a muchos a endeudarse. “Hemos visto pérdidas fuertes, y la gente está muy endeudada. El comprador se aprovecha de nuestra vulnerabilidad”.