Protestan por daños contra humedales

Integrantes de diferentes organizaciones, grupos de ambientalistas y colonos bloquearon la carretera Panamericana, a la altura de la entrada oriente a San Cristóbal, para exigir la suspensión y clausura de toda invasión, relleno o construcción en los humedales ubicados en la ciudad. 

También demandaron “revisar y revocar todos los cambios de uso de suelo emitidos sin consulta pública o con irregularidades administrativas o legales, que hayan afectado o alterado los escurrimientos naturales y/o la recarga de agua, en los últimos 15 años”. 

Manifestaron que decidieron realizar el bloqueo con el “único objetivo de defender nuestra casa. Sabemos que lo que hacemos hoy es en beneficio de todos, incluso de quienes no están de acuerdo con esta acción o de quienes son responsables de la destrucción ambiental; a las autoridades les repetimos lo que ya saben: nuestra única demanda es la protección de nuestras fuentes de agua”, remarcaron.

Los más de 600 manifestantes, que cerraron la carretera que comunica a esta ciudad con Comitán, Ocosingo, Palenque y otros municipios, exigieron a las autoridades competentes “elaborar y aprobar los Programas de Manejo de los humedales de María Eugenia y la Kisst, atendiendo con prioridad su protección, delimitación y manejo”.

En un documento pidieron “acordar, elaborar y aprobar la inmediata actualización del Programa de Desarrollo Urbano, garantizando un proceso transparente y la integración de la participación ciudadana en todo el proceso de elaboración; acordar la elaboración del Atlas de Riesgos y del Programa de Mitigación de Riesgos y Restauración de sitios”. 

Dentro de las 15 peticiones solicitadas se encuentran las siguientes:

“Sancionar a los particulares responsables, profesionistas y funcionarios públicos por realizar alguna acción u omisión que haya permitido la realización de actos de ecocidio en San Cristóbal; expropiar los predios de utilidad pública y beneficio ambiental que requiere la ciudad; suspensión y clausura de bancos de materiales pétreos que no cuenten con autorizaciones urbanas y ambientales”.

Los inconformes expresaron en el documento que “la noticia de hoy no es que hay un bloqueo, sino que llevamos años destruyendo nuestra madre tierra, ante la mirada indiferente de ciudadanía y gobierno. Son responsables las autoridades de los últimos 40 años”. 

“Estamos aquí, personas comprometidas con el futuro de la vida en nuestra cuenca de Jovel, esta cuenca que ha dado vida a nuestros antepasados tzotziles, tzeltales y de otros pueblos originarios”.

Finalmente, recordaron que “la última acción de devastación de la que tuvimos conocimiento tuvo lugar el pasado 7 de septiembre, cuando personal de la Comisión Federal de Electricidad instaló el servicio de energía eléctrica en dicho predio”.