Productores de palma de aceite de Chiapas lamentan que este cultivo generador de empleos directos e indirectos, así como recursos económicos para la zona, sea objeto de una campaña de desprestigio que se desarrolla en México y que los margina de recibir apoyos gubernamentales, aduciendo que este sector es responsable de la deforestación y el desabasto de agua en las zonas de cultivo.
En entrevista a José Luis Méndez Hernández, representante nacional de los palmicultores en México, expuso que existen estudios científicos sustentados por instituciones educativas, entre estas la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach), que señalan que el cultivo de aceite de palma no es la causa principal de deforestación en México, como se pretende culpar, sino que es consecuencia de las malas prácticas que se realizan en todos los cultivos, incluso en la ganadería.
Dijo que en México el pequeño productor de palma solo cuenta desde una a 10 hectáreas en promedio, y que en general lo que hace es un cambio de cultivo y reforestar áreas que han sido abandonadas por la ganadería.
Estudios
Con respecto a la supuesta idea de que la planta seca el suelo, indicó que los estudios detallan que la palma no gasta mucha agua, esto en comparación a otros cultivos, como lo pretende justificar la campaña de desprestigio que hay en el país.
Estos argumentos sin sustentos han frenado que el sector sea susceptible a apoyos gubernamentales, aun cuando son generadores de importantes fuentes de empleo.
Detalló que el estudio demuestra que la palma de aceite demanda 36 litros de agua al día por planta, que al multiplicarlo por 143 plantas, que son las sembradas por hectáreas, equivale a cinco mil 148 litros en esta extensión de terreno.
Comparado con el cultivo de banano, el uso del vital líquido es mucho menor, toda vez que este demanda 4.73 litro de agua por planta al día, pero al multiplicarlo por dos mil 700 plantas, que es el número de siembra por hectárea, equivale a 12 mil 771 litros en esta extensión de tierra, lo que demuestra que la palma de aceite no es la principal causa de secar los suelos.
En el caso de la producción de papaya, este fruto demanda 3.5 litros de agua por planta al día, que al multiplicarlo por las dos mil 700 plantas que caben en una hectárea, equivale a un consumo de cinco mil 831 litros de agua en la misma extensión de terreno, cifras que corroboran que la palma usa menos vital líquido que otros cultivos.