Los miembros de la organización Las Abejas de Acteal y las autoridades de la comunidad de Tzajalchen, municipio de Chenalhó, iniciaron en ese lugar este sábado una jornada de ayuno y oración por la paz en Chiapas y en México.
Al mismo tiempo realizaron una celebración ecuménica para “unirnos al dolor por los que sufren igual que nosotros, no solamente en Chiapas ni en México, también en otros países del mundo”, al tiempo que reactivaron un campamento por la paz
La agrupación, a la que pertenecían los 45 indígenas asesinados por paramilitares priístas el 22 de diciembre de 1997 en Acteal, sostuvo que “la situación cada vez más va empeorando”.
Los graneros estarán vacíos
En un comunicado añadió que “ahora vendrá el tiempo de la cosecha y no habrá cosecha; los graneros estarán vacíos, los jornaleros sentados y cruzados de manos. Vendrá la hambruna y enfermedades en muchas y en otras partes. En Chicomuselo, Frontera Comalapa, Chenalhó, Pantelhó y otros municipios existen grandes violencias”.
Reiteró que “nosotros estamos con mucha preocupación y atemorizados por esta ola de violencia desatada en esta región de los Altos y la costa del estado, pero aun permanecemos por nuestra misión y nuestro compromiso de paz, ya que está claro que en el mismo Estado Mexicano no hay voluntad de garantizar la paz en Chiapas ni en México”.
Insistió en que “nosotros como pueblo y organización nos mantenemos en la fidelidad de buscar la paz, según como enseño Jesús en el Monte de los Olivos sobre la bienaventuranza”.