Tres días después del asesinato del sacerdote Marcelo Pérez Pérez, la Fiscalía General de Chiapas realizó el peritaje en el barrio de Cuxtitali, lugar donde fue asesinado el domingo por la mañana.
El miércoles, peritos y fiscales inspeccionaron el sitio donde un sicario atacó a balazos al párroco cuando había terminado de oficiar la misa de las 7 de la mañana, y se encontraba en su camioneta, una Ford, color blanca, que había estacionado sobre la calle Manzanas.
El sacerdote, al salir de la iglesia, dio al menos 50 pasos para subir a su vehículo y dirigirse al barrio de Guadalupe, ubicado a unos 800 metros, cuando un hombre vino de frente, rodeo el vehículo y le disparó en la ventanilla para luego huir por la calle Peras, que enlaza con Franz Bloom, vía que lleva al centro y otros barrios de la ciudad.
El cura ya había encendido la camioneta al momento que le dispararon, al menos cuatro veces con un arma de fuego. El vehículo circuló sin control al menos 20 metros, pasó la calle Las Peras para detenerse en una banqueta.
Ayer, los peritos y fiscales realizaron los peritajes en la plazuela de Cuxtitali, ante la presencia de curiosos que observaban el trabajo a lo lejos.
Hasta ahora, un hombre identificado con el alias de “Scrapy”, que fue capturado en el Mercadito 2, ubicado sobre la calle General Utrilla, a unos 700 metros del centro histórico de San Cristóbal de las Casas, es el único detenido y permanece en prisión preventiva.
Soldados de la 31 Zona Militar, Guardia Nacional y Policía realizan operativos en varios puntos de la ciudad en búsqueda de más cómplices.