De los aproximadamente 45 millones de litros diarios que bombea en San Cristóbal el Sistema de Agua Potable y Alcantarillado Municipal (Sapam), entre 20 y 25 millones se desperdician por fugas, informó Rodrigo Hess Poo, director de la Asociación Ciudadanos por la Acción Territorial en la cuenca de San Cristóbal.
Explicó que ello se debe a que la red de distribución y la tubería, sobre todo en el centro de la ciudad, fueron colocadas hace más de medio siglo, por lo que es necesario remplazarlas.
“La tubería ya no sirve o hay asentamientos y se rompió la línea, ya sea por edad o por mala instalación, como ocurrió en la anterior administración municipal que colocaron manguera negra para riego, lo que augura una fuga segura, además de que la aprietan con alambre galvanizado y se afloja rápidamente”, afirmó.
Dijo que por esa razón, la Asociación que encabeza, con 18 años de haber sido fundada, lleva a cabo, entre otros, un programa llamado “En busca del agua perdida”, cuyo objetivo es detectar con equipo especializado, fugas en la tubería y corregirlas.
Trabajos de detección
Explicó que por ello, desde hace varios días iniciaron los trabajos con recursos propios para cambiar tubería en una parte de la calle Ejército Nacional, en el barrio de Guadalupe, en la que se detectaron al menos siete fugas en un tramo de 220 metros.
Milton Gómez, quien también trabaja en la agrupación, señaló que se remplazará la tubería antigua que es de asbesto y cemento porque tiene fugas y se cambiará por tubería de PVC y mangueras de norma. “24 tomas tenemos en el tramo y se está considerando un ramal de 70 metros más que va hacia la calle Isabel la Católica para conectar al menos siete tomas de usuarios que se han quejado por la falta de agua”.
Manifestó que la inversión de los trabajos para recuperar el agua en ese tramo, que incluye el cambio del tubo principal de la red de dos pulgadas, es de 350 mil pesos, incluyendo la reposición de concreto.
El ambientalista Alejandro Ruiz Guzmán, quien labora también en la Asociación, mostró varios tubos retirados de las tomas de las casas con hoyos y picaduras por su antigüedad, lo que ocasionaba fugas importantes de agua.
“Son tubos picados y con agujeros por ser una red vieja de más de medio siglo. En esas condiciones es difícil que suba el agua a los tinacos y así está la red de agua en toda la ciudad”, aseveró.
Hess Poo informó que se escogió ese tramo porque “históricamente el barrio de Guadalupe, que está en lo alto, ha padecido por la falta de agua”.
Resultados
Milton comentó que en San Cristóbal han recuperado mediante la detección y reparación de fugas no visibles, más de cuatro millones de litros de agua de 2021 a la fecha, a través del programa “En busca del agua perdida”.
Además, abundó, con las mismas acciones han recuperado en el mismo período más de 15 millones de litros en total en los municipios de Ocozocoautla, Berriozábal, Tuxtla Gutiérrez, Chiapa de Corzo y Las Rosas, donde también están trabajando.
Rodrigo Hess dijo que la Asociación lleva a cabo además otros programas como el de reforestación; el de rescate de las bromelias; en la cuenca cada gota cuenta; del territorio a la llave en busca de mantener el agua; agua sana, panza sana, y uno de comunicación para destacar la importancia del agua aunque sea una gota.