Reconocen participación agrícola de las mujeres

“Hay muchos casos de éxito sobre la participación de mujeres rurales en los hubs de Oaxaca y Chiapas que fueron recogidos en este proceso. Está previsto que estos estudios de caso formen parte de un anexo a la guía para ilustrar por qué la participación de las mujeres rurales es tan importante desde su propia perspectiva”, comenta Ángela Meentzen, gerente especialista en agricultura del Centro Internacional para el Mejoramiento del Maíz y el Trigo (Cimmyt), quien destaca el caso de doña Juanita, una indígena tseltal de la comunidad La Providencia, en Ocosingo.

Doña Juanita inició hace cinco años su trabajo con el Cimmyt, quien antes de ello comentó que solo sembraba maíz y frijol, además de que sus cultivos presentaban problemas de plagas y quemaban todo el rastrojo.

“Cuando vinieron los ingenieros nos invitaron a participar con ellos. Al principio como que no nos interesó mucho, pero nos dejamos enseñar. Nos enseñaron a sembrar otros cultivos como el girasol, el cacahuate, otras verduras y los frutales como el limón y las guanábanas”, comenta doña Juanita.

Derivado de ello, doña Juanita ya no quema el rastrojo y ahora tienen cultivos durante todo el año, siembran más especies y utilizan productos orgánicos que les enseñaron a preparar, para así vender más cosas en el mercado.

“Yo y mi hija nos ocupamos de la venta de los productos (frijol, maíz, verduras, calabacitas, elotes y flores); sobre todo la venta de flores nos ha dado muy buen resultado y hemos sacado un buen dinerito”, narra la productora.