Reflexionan sobre las raíces africanas
Evento de afrodescendencias en Tapachula. CP

El Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova, realizó el encuentro “Nuestras raíces africanas”, desde Tapachula, en la cual se reflexionó sobre los factores diferenciadores que viven día a día por sus características físicas.

Entre los asistentes, un haitiano dijo: “el racismo va estar muy difícil de combatir, por que una vez que tienes la piel negra y el cabello no lacio desde ahí te comienzan a catalogar”.

“Por ejemplo, aquí en Tapachula, si llego a solicitar información para rentar una casa tal vez ese mismo día llegará otra persona, le dan mayor prioridad a la otra o yo tendría que pagar más que la persona que tiene su piel blanca y/o cabello lacio”, puntualizó.

Contribución

Benjamín Lorenzana Cruz, investigador de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach) a través de su investigación “La población afrodescendiente y sus aportaciones a la cultura chiapaneca”, analizó la contribución de la población africana (negros y mulatos) en la provincia del Soconusco, en especial las manifestaciones culturales como: religión, danza y gastronomía.

Así mismo, explicó los motivos del despoblamiento y repoblamiento del noroeste de la región, su aporte en la economía de la zona, en las estancias ganaderas y obrajes de añil y milicias.

El espacio territorial ocupó Mapastepec, Pijijiapan y Tonalá. La información sobre el origen de la población negra y mulata en estos municipios se encuentra en distintas fuentes coloniales, como son los registros de matrimonios, bautismo y defunciones, así como padrones regionales de confesiones, censos generales de población, entre otros.

Exesclavos

Lorenzana Cruz enfatizó que la introducción de la población negra a Chiapas, en especial a la costa, es parte de un proceso histórico amplio que vincula las historias de Europa, África y América. Puesto que el periodo de comercio de esclavos africanos tiene sus raíces en las exploraciones de los portugueses a las costas africanas en el Siglo XV.

Aunado a ello, indicó que los estudiosos coinciden en señalar las diversas actividades que desempeñaron en México, pero fue en las plantaciones de caña de azúcar, minas, estancias ganaderas y obrajes, donde más se explotaba a esta población.

Otras investigaciones apuntan que los primeros negros y mulatos que llegaron a México fueron sirvientes personales de conquistadores y religiosos, aunque algunos también participaron en las campañas de conquista.

Diversificación

Dicho esto, de manera general, el investigador señaló que la población africana y sus descendientes (mulatos o negros libres) se encontraban presentes en diversas comunidades, pero las tres ciudades ya mencionadas son en las que más se identificaban.

Al mismo tiempo, recordó que Arriaga fue un pueblo que nació a partir del ferrocarril, pero cuando no existía esta ciudad, había varias haciendas ganaderas como El Rosario, de propietarios españoles. La mayoría de la población que trabajó en estas haciendas eran mulatos, según los padrones de la época colonial.