Una semana después de la trifulca, con disparos y daños a tres patrullas, dos de la Policía Estatal y una de la Municipal, además de la retención de las armas de los uniformados en la que se vieron implicados los miembros de la localidad Monte Flor, municipio de Villa Comaltitlán, las autoridades locales señalan que todo está tranquilo y que ya entregaron las armas, además se pagarán los daños y se seguirá siendo una comunidad tranquila, en paz y modelo.
Irregularidades
Señalan que no fue toda la comunidad la que puso en jaque a las corporaciones policiacas, sino que fueron los integrantes de una familia que disputan un terreno intestado.
Lo anterior evidenció las irregularidades en los cuerpos policiacos porque una familia no debería tener ni capacidad de enfrentar a las autoridades, ni mucho menos de someterla.
Este viernes por la tarde, las autoridades rurales de la comunidad Monte Flor, de poco menos de mil habitantes, y con la ausencia del presidente municipal, Manuel de Jesús Cruz Coutiño, hicieron la aclaración de que todo está en paz, que en la comunidad donde no se venden bebidas alcohólicas y no tiene problemas de seguridad.
Declaración
En la aclaración, Rodrigo López, comisariado ejidal; Gabriel Pérez, tesorero; Tomas López, juez rural; y Mario Hernández, del consejo de vigilancia, aclararon que no fue toda la comunidad la que sometió a la policía estatal y municipal al desarmarlos y dañar las patrullas, sino miembros de una familia.