Solicitantes de concesiones de taxis y directivos del Consejo de Choferes Unidos, Los 400 de Tapachula, expresaron al gobernador Rutilio Escandón y a la secretaria de Movilidad y Transporte, Nancy Vences Montiel, su respaldo por el compromiso y transparencia en el proceso de concesionamiento.
Recomiendan no dejarse chantajear por “berrinches” de seudolíderes preocupados por no poder cumplir sus promesas y venta de concesiones.
Los directivos de la agrupación: José Luis Martínez Carpio, Enrique Borges Julián, Jorge Adrián Vázquez Pérez, Omar Martínez Morales y José Luis Pérez Noriega, afirmaron que el proceso de concesionamiento para Tapachula se realiza con orden y disciplina; a los miembros de este gremio no les han pedido dinero, lo que da cuenta de la política comprometida del gobierno.
Lamentaron la actuación de algunos líderes y en particular la declaración del Manuel de Jesús Córdoba, quien señala que a algunos de los supuestos choferes que encabeza les rechazaron sus expedientes; sin embargo, esto no ha sido privativo de nadie y ocurrió incluso con el grupo de los 400, ya que quienes no cumplieron con los requisitos en su solicitud fueron rechazados.
Reconocen que en los últimos días ha habido denuncias en contra de seudolíderes que andan “desesperados”, tratando de justificar con sus “clientes” que no van a poder cumplir con sus promesas de venta y regularización de concesiones y se verán obligados a regresar el dinero que recibieron, pues es del conocimiento público que se presentaron muchos expedientes con inconsistencias, falseados, con antigüedad, pero a nombre de otras personas que son detectados en las revisiones.
Señalaron que en el grupo que encabeza Manuel de Jesús Córdova, que estuvo frente a la delegación de Transporte en Tapachula, son personas ajenas al transporte, ya que los choferes no reconocen a ninguno.
El llamado al Gobierno del Estado y la SMyT es a mantener los principios establecidos por la ley y no ceder a las prácticas negativas de seudolíderes acostumbrados al beneficio económico a través del coyotaje y la gestión fraudulenta que les ha permitido por mucho tiempo dinero sucio.