Reunión de países, oportunidad para atender migración

Fernando Castro Molina, analista migratorio y exviceconsul de Guatemala en Comitán de Domínguez, consideró a la “Reunión Ministerial de declaración de Los Ángeles en el tema de migración y protección”, como una oportunidad para trabajar el tema migratorio de forma coordinada e integral.

“Es una oportunidad para trabajar en forma integral con propuestas de solución tanto a corto, mediano y largo plazo, para generar empleo y desarrollo en los países expulsores de migrantes; de no hacerlo, veremos incrementar las cifras de capturas de migrantes en la frontera sur de Estados Unidos”, advirtió.

Castro Molina aseguró que, de 2020 a 2023, se realizaron 8 millones 270 mil 245 capturas adicionales en México, efectuadas a menores de edad, mujeres y hombres de todas nacionalidades. Y se espera una cifra récord de capturas para este presente año.

Este martes, Guatemala fue el país anfitrión de dicha reunión a propuesta del Gobierno de los Estados Unidos. Se contó con la participación de 22 países del continente americano, así como de organismos internacionales.

Dentro de los países participantes estuvieron: Argentina, Barbados, Belice, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Estados Unidos, México, Panamá, Paraguay, Perú, Surinam y Uruguay.

En la reunión, Castro adelantó que se espera conocer los logros realizados por los países en los compromisos suscritos en la declaración de Los Ángeles, Estados Unidos, así como nuevas iniciativas para el abordaje de la migración y protección en el marco de los pilares que se definieron.

Dentro de los objetivos de la “Declaración sobre Migración y Protección de Los Ángeles” están: fortalecer los esfuerzos nacionales, regionales y hemisféricos, a fin de crear las condiciones para una migración segura, ordenada, humana y regular; así como buscar fortalecer los marcos necesarios para la protección y cooperación internacional; proteger la seguridad y la dignidad de todas las personas migrantes, refugiadas, solicitantes de asilo/refugio y apátridas, independientemente de su situación migratoria, y a respetar sus derechos humanos y libertades fundamentales.