El presidente de la Barra Chiapaneca de Abogados, Servando Cruz Solís, expuso que el sacerdote fundador de una congregación en la entidad, acusado de abuso sexual, podría obtener una sentencia de hasta 60 años de prisión.
Este posible dictamen es por el delito de abuso de autoridad, pederastia, abuso sexual, más los que resulten. El sacerdote Salvador Valadez Fuentes, recién expulsado por el Vaticano, podría enfrentar una pena de 30 a 60 años de prisión.
Cruz Solís indicó que este delito se persigue de oficio, y aunque existe una investigación abierta en los Estados Unidos, por la denuncia de las víctimas en los años 90, la FGE tiene que realizar las investigaciones correspondientes.
El pasado fin de semana, el arzobispo Fabio Martínez Castilla, monseñor de la Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, informó sobre la determinación que realizaron desde Roma, de expulsar al clérigo, quien fundó una congregación en Chiapas.
Los señalamientos contra Valadez Fuentes fueron hechos en el 2018 por parte de uno de los fundadores de una congregación religiosa, que derivó en una investigación por parte de la congregación para el clero.
Salvador Valadez fue uno de los fundadores de la fraternidad “Discípulas de Jesús Buen Pastor”, en el año 2005, y del Centro Interamericano de Estudios Superiores Evangelii Nuntiandi, ambos sitios ubicados en la capital de Chiapas. Durante las indagatorias, el entonces sacerdote fue suspendido del ejercicio público del ministerio sacerdotal.
El sumo pontífice aceptó la dimisión del estado clerical y la dispensa del celibato que el mismo Valadez Fuentes solicitó el 6 de noviembre de 2021 a las autoridades eclesiásticas, y con lo cual el clérigo queda libre de la promesa realizada y puede contraer matrimonio, pero pierde al mismo tiempo el estado clerical.
Sobre el tema, el experimentado abogado dijo: “Este delito se persigue de oficio, no hay necesidad de que haya una denuncia penal, basta la denuncia que se hizo, pero tengo entendido que hasta la fecha la FGE no ha hecho su trabajo que le corresponde, porque todo mundo está enterado, menos la Fiscalía”.
