En Chiapas existen agrupaciones criminales que producen y comercializan pornografía infantil, además de comercio internacional de infantes de origen indígena y en algunos casos migrantes, explicó la fundadora de la asociación civil Granito de Arena, Elena Torres Villanueva.
Añadió que tiene denuncias y acompañamiento de casos de esta naturaleza, además de documentados casos donde incluso representantes del Poder Legislativo comprobaron estos grupos de comercio, particularmente de pornografía infantil étnica.
En comunidades indígenas están identificados grupos delincuenciales que están produciendo estos contenidos, evidentemente abusando de menores de edad de origen indígena.
Estos videos llamados "etnoporno", pueden encontrarse en los mercados comunicativos; antes era simplemente contenido sexual entre adultos y ahora también de menores.
Explicó que además han identificado tráfico a otros estados y del exterior del país de niños para actividades sexuales, de pueblos originarios, pero además de infantes migrantes en Chiapas.
Este fenómeno, sostuvo, ya ha sido advertido por diversas entidades en México, quienes han iniciado un alertamiento para frenar acciones de esta naturaleza que pudiese ocurrir en sus estados.
Dijo corresponderá a las autoridades realizar las investigaciones pertinentes para frenar estructuralmente este fenómeno.
En tanto, y aunque se trata de situaciones distintas, recordó a los padres reconocer los comportamientos depredadores de abusadores, entre ellos identificar que las personas que abusan se identifican como sujetos que aman a los niños. De tal suerte que serán encantadores con los infantes.
