A un año del sismo de magnitud 8.2 con epicentro en el golfo de Tehuantepec, a 137 kilómetros de Pijijiapan, que sacudió a Chiapas; la iniciativa privada recordó que del total de establecimientos, 79.2 por ciento no reportaron afectaciones y 20.8 por ciento sí.
La Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Tuxtla Gutiérrez (Canaco) mencionó que los negocios afectados reportaron techos caídos, pérdida de equipo, insumos, paredes cuarteadas; mientras que otros registran únicamente fisuras, grietas, cristales rotos, caída de plafones, repellos y otros de menor magnitud.
Agregó que al momento de la contingencia se registraron en la ciudad capital 70 empresas con daños de algún tipo, las cuales fueron aumentado con el paso del tiempo, y la mayoría registraron los requisitos necesarios para gestionar los apoyos ante la Secretaría de Economía, dependiendo el nivel de afectación.
Indicó que se sostuvieron reuniones con representantes de la Secretaría de Economía Federal, para pedir la creación de apoyos para los empresarios afectados, algunos directos, otros por medio de un crédito de dispersión y para el resto créditos con la banca comercial.
Oscar Gabriel Corzo Tovilla, presidente de Canaco Tuxtla, consideró que el impacto del terremoto no fue tan catastrófico, en consideración de un comparativo entre el número de empresas afiliadas que superan las mil 500 y las que resultaron afectadas, se observó que no fue tan significativo para el sector.
Sin embargo, sostuvo que en los municipios más cercanos al epicentro muchos negocios si registraron pérdida total y otros que no colapsaron quedaron como inhabitables por daño estructural.
Finalmente, señaló que uno de los vectores en Tuxtla Gutiérrez es el turismo de negocios, rubro que sí ha disminuido a partir del terremoto, porque muchas personas fuera del estado desconocen cuál es la situación que prevalece en la entidad, y algunos creen que la destrucción fue catastrófica.