Señalan suplantación de instituciones financieras

La Comisión Nacional para la Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) dijo que a nivel nacional se ha dado a conocer que al menos 30 instituciones financieras han sido víctimas de suplantación o uso indebido y sin autorización de su nombre.

Este reporte es hasta el mes de enero y contó con información de 30 instituciones financieras que han sido afectadas por la suplantación o uso indebido y sin autorización de su nombre comercial, denominación, logo e incluso de algunos de sus datos fiscales o administrativos, a las que ahora se suman 32 instituciones más.

De acuerdo con este reporte, las instituciones afectadas son FSMP Soluciones de Capital, S. A. de C. V., Sofom ENR, Financiera Amigo, AREZ Financiera, Mexcapital Intercontinental, S. A. P. I., Financiera Santos, Financiera Maestra, Sefiismo, Financiera Súmate, Invesur, CGB Hipotecaria, Vamos a Mejorar, Apoyos Inteligentes Quirazo, Fisofo, GFM Puebla, HIR Compañía de Seguros, Soporte Impulsa, Sofinde, Agrumnostro de México.

Además de Dinero Para Crecer, Grupo Comprometido, Acsein, Ategra Arrendamientos Integrales, CREDBOSS, Forza Financiera, DD3 Hipotecaria, Siempre Creciendo, GEM Opticredit, Inclusión Hipotecaria, Credicaor, GE Qualy, Novarec y Factor GFC Global.

Por ello, a las personas interesadas en obtener un crédito o cualquier otro servicio financiero deben de estar alertas del modus operandi de los suplantadores.

Los delincuentes utilizan sin autorización los nombres comerciales, denominaciones sociales y/o imagen corporativa de las entidades financieras debidamente autorizadas y registradas para hacerse pasar por ellas, cambiando una letra o letras del nombre, colores o formas de los logotipos para engañar.

Este uso se hace tanto por medios convencionales, en folletos, como en medios digitales (páginas de internet, redes sociales, aplicaciones móviles, etcétera).

Otro signo de alerta es que solicitan a sus víctimas enviar su información personal vía WhatsApp o mensajes de texto, o bien, acceder a través de permisos de aplicaciones móviles, poniendo en riesgo los datos personales o sensibles.

También piden anticipos de dinero en efectivo o mediante depósito a una cuenta bancaria a nombre de una empresa o persona física distinta a la entidad financiera suplantada, con la supuesta finalidad de gestionar el crédito, adelantar mensualidades, pagar gastos por apertura o como fianza en garantía, generalmente por el equivalente al 10 % del monto total del crédito solicitado que puede ser desde mil hasta doscientos mil pesos.