El cáncer infantil es un problema de salud pública, anteriormente no se hacían tantos diagnósticos; sin embargo, en México se tiene un registro aproximado de dos mil casos al año.
Sobre este tema, la oncóloga del hospital de Especialidades Pediátricas, Diana Villafuerte González, explicó que el cáncer infantil es un problema de salud pública.
Actualmente constituye la principal causa de muerte no accidental en pacientes de cinco a 14 años, en la República se tiene aproximadamente un diagnóstico de dos mil casos al año, y Chiapas es el segundo estado con mayor mortalidad.
Si bien reconoció que la entidad es de los estados con una gran variedad de padecimientos oncológicos, la leucemia linfoblástica aguda es la principal.
¿Cómo impacta en las familias?
Hay un antes y un después en las familias, con tratamientos muy largos, por lo que no hay bolsillo que alcance para poder llevar a cabo el sustento de estos pacientes, además de que la gran mayoría se tienen que trasladar de un centro oncológico, desde donde viven. En el caso de Chiapas, es a Tuxtla en el hospital de Especialidades Pediátricas, Doctor Manuel Velasco Suárez, que es donde se tiene atención a pacientes que no sean derechohabientes.
Por lo anterior, dijo que tienen que dejar su casa, a lo que se dedicaban en su lugar de origen, teniendo un impacto en los pacientes.
Sobre los posibles síntomas y la manera de prevenirlo, explicó que es importante tener siempre un médico pediatra de cabecera, porque él va a conocer al paciente.
El cáncer no solo es un solo padecimiento, es un complejo de enfermedades que van desde la cabeza, ojos, hígado, riñón, hueso, por lo que va a depender mucho dónde se origina y de los síntomas que va a desarrollar.
Citó que si los padres o los adultos ven a un niño que siempre está cansado, que no juega, con poco apetito, que le sangra la nariz, que tiene fiebre y ya se dieron muchos antibióticos y el pediatra ya los dio en varias ocasiones, es importante que lo vea un oncólogo infantil para poder descartar este tipo de padecimientos.
Pacientes de 0 a cuatro años generalmente tiene padecimientos de nivel abdominal, por si se les observa una bolita es aconsejable llevarlos al médico.
En el caso de los pacientes de cinco a 10 o 12 años, se asocia más a enfermedades de la sangre y se observan sangrados de nariz, pérdida de peso y fiebres que no mejoran a pesar de los medicamentos.
Puntualizó que se ha notado que los menores que se alimentan con lactancia materna crean una protección y disminución del riesgo de ciertos cánceres.