El sismo de 6.9 grados en escala de Richter ocurrido el 7 de julio del 2014 abrió grandes grietas en la carretera que sirve como ruta de emergencia y evacuación de comunidades enclavadas en las faldas del volcán Tacaná.

Son cortes en la tierra profundos que con el tiempo se han llenado de monte y ante ello, los habitantes de las localidades temen que en cualquier momento pueda ocurrir una desgracia mayor, ante la falta de atención de las autoridades federales y estatales que se comprometieron desde ese entonces a realizar las reparaciones y rehabilitación de la red caminera.

En la carretera que comunica a las comunidades Chiquihuites y Talquián, así como en la de Cacahoatán a Unión Juárez, el sismo dejó derrumbes y abrió la tierra. Hoy en día se encuentra en las mismas condiciones, con la diferencia que las grietas están enmontadas.

La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y la de Infraestructura (Sinfra), junto con el Sistema de Protección Civil, hicieron los diagnósticos y se comprometieron a realizar las reparaciones, sin embargo los trabajos iniciados a la altura de Córdova Matasanos, fueron abandonados hace meses por la dependencia federal y representan un riesgo en aumento.

Juan Manuel Juárez Cisneros, habitante de Chiquihuites, una localidad enclavada en las faldas del coloso del sur, lamentó el abandono por parte del Gobierno federal para atender los daños en virtud a que “estas carreteras son las rutas de evacuación y salidas de emergencia en caso de actividad volcánica”.

A consecuencia del movimiento telúrico del 7 de julio del 2014, se registraron daños en 38 municipios de las regiones Soconusco, Costa, Sierra, Frailesca, Frontera Sur y Centro del estado, y se declaró zona de desastre natural por parte de la Coordinación Nacional de Protección Civil dependiente de la Secretaría de Gobernación, para utilizar recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) y atender los daños.

Los habitantes de la zona lamentan que hasta ahora no haya una respuesta positiva, mientras temen que de presentarse otro temblor de igual magnitud, puedan agrandarse las grietas que existen sobre la carretera y queden incomunicados.

En el marco de los simulacros de sismos en la entidad, pidieron la intervención del gobernador Manuel Velasco Coello, con la finalidad de que atiendan la problemática y no solamente lo relacionado con la vivienda, en cuyo caso también presentan atrasos considerables.