Como parte de una campaña nacional en el marco del Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer que se conmemora cada 15 de febrero, el Hospital de Especialidades Pediátricas hace un llamado a la ciudadanía a donar trajes de princesas, súper heroínas o súper héroes para niños con cáncer, informó en entrevista Enfrían Aquino Fernández, médico adscrito al Servicio de Hematología Pediátrica de dicho nosocomio.
La campaña tiene su antecedente hace un año, cuando se realizó por primera vez en el Hospital Civil de Guadalajara a instancia del oncólogo pediatra Sergio Gallegos. En esa ocasión se logró juntar mil 500 trajes y ante esta respuesta de la sociedad, el médico invitó a médicos de hospitales de todo el país que se dedican a atender a niños con cáncer y otras enfermedades malignas, a formar parte del proyecto.
En atención a este llamado, el Hospital Pediátrico de Especialidades de esta ciudad también inició su campaña el pasado 9 de enero, misma que culmina el 31 del mes en curso.
La donación puede realizarse en el Hospital Pediátrico de 8:00 de la mañana a 6:00 de la tarde en el departamento de Trabajo Social, o de 4:00 de la tarde a 9:00 de la noche en el consultorio del médico Efraín Aquino Fernández, que se ubica en 4 Norte Poniente entre 15 y 16 Poniente en la colonia Las Arboledas, atrás de Telmex.
La intención es reunir la mayor cantidad posible de trajes de super héroes, súper heroínas o princesas para obsequiarlos a los niños del Hospital Pediátrico el próximo 15 de febrero, que es cuando se conmemora el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer Infantil.
Los trajes pueden ser en tamaños para niños de uno a 12 años y en el caso de los mayores pueden ser playeras con el logotipo de algún personaje. “La idea es que los niños entre en el personaje (con súper poderes) y luchen contra la enfermedad” señaló el médico.
El propósito es hacer conciencia de la realidad de esa enfermedad, hay niños enfermos en Chiapas, que están siendo tratados y el que ellos reciban estos objetos les ayudará a saber que hay gente que quiere que mejoren.
Se reciben trajes en buen estado que vengan limpios, listos para entregarse a los niños, de los hijos o de los sobrinos, que hayan dejado de usar porque crecieron o ya no les gusta, incluso aunque los usen todavía para enseñar a los niños lo gratificante de donar.












